Más de cien hombres enmascarados irrumpieron en la Catedral del Arcángel Miguel en Cherkasy durante una liturgia, desalojando a los fieles y robando iconos.
La toma violenta de la catedral del Arcángel Miguel en la ciudad ucraniana de Cherkasy por un grupo de matones enmascarados durante una liturgia “puede ser vista como una grave violación de la libertad religiosa y de los derechos humanos”, afirma el Dr. Marco Marsili, investigador de la Universidad Cà Foscari de Venecia y del Centro de Investigación del Instituto de Estudios Políticos de la Universidad Católica Portuguesa.
Para un creyente devoto, independientemente de su denominación, este ataque representaría una profunda profanación de un espacio sagrado”, afirma.
Las iglesias se consideran lugares de refugio, oración y paz, y un ataque durante una liturgia nocturna, cuando los fieles están inmersos en una profunda práctica espiritual, evocaría sentimientos de profunda conmoción y tristeza”.
La expulsión de Rusia del Consejo de Europa en 2022 también significa que “las comunidades religiosas vinculadas al Patriarcado de Moscú pueden ahora ser percibidas como fuera de la protección directa de los mecanismos europeos de derechos humanos, lo que complica aún más la respuesta de las instituciones de la UE”, dice el Dr. Marsili.
El pastor Mark Burns, amigo personal de Donald Trump y ex miembro del consejo evangélico de la Casa Blanca, también ha condenado el ataque a la catedral, insistiendo en que “debería ser categorizado al más alto nivel de terrorismo y debe ser resuelto rápidamente”.
Estoy totalmente de acuerdo en que todas las organizaciones que creen en los derechos humanos deben manifestarse en contra de esta catástrofe que ha afectado a personas inocentes y libres en Ucrania mientras practican su fe.
Estoy del lado de los creyentes y seguiré manifestándome en contra de cualquier forma de violencia, cualquier forma de maldad que se abata contra cualquier grupo religioso en el mundo”, afirma.
El pastor Burns también criticó al actual liderazgo estadounidense por la aparente falta de respuesta a este ataque a los fieles, insistiendo en que la administración Biden-Harris tiene “muy poca consideración por las personas de fe en Estados Unidos y en el mundo”.
WASHINGTON, DC/LISBOA/PORTUGAL.
VIERNES 18DE OCTUBRE DE 29024.