Los testigos de la trampa trans

Nos quieren “robar el cuerpo”, pretenden alterar las raíces mismas de la identidad humana. Las leyes “Trans” son instrumentos que puede originar desastres psíquicos y amputaciones físicas irreparables en la vida de muchas personas, sobre todo niños y adolescentes.

Pedro Mejías
Pedro Mejías

Hablamos hoy de “la trampa trans”, por ser de máxima actualidad: se está tramitando parlamentariamente en España una de las leyes más permisivas y “criminales” del mundo. Al servicio únicamente de la Agenda 2030 y donde los lobbies LGTBI y los lobbies feministas se están dividiendo fuertemente entre ellos.

¿Es que no es verdad que los niños tienen pene y las niñas tienen vulva? ¿Por qué entonces nos quieren robar el cuerpo? ¿Quién pretende alterar las raíces mismas de la identidad humana? 

Las leyes “Trans” son instrumentos que puede originar cambios de calado en la vida de muchas personas. Se promulgan para defender -dicen- los supuestos derechos de una minoría, pero lo cierto es que están dotadas de todos los recursos necesarios para hacer sentir su radio de influencia en un espacio lo más grande posible, afectando y destrozando, de camino, a muchas personas. Son auténticos misiles de crucero de la agenda del poder mundial. 

“Podemos”, socios de gobierno de Pedro Sánchez, está apretando el acelerador para aprobar la ley antes de final de año. Necesitamos evitar esta catástrofe. Inglaterra o los países nórdicos están dando muestras de los resultados de la “Ley Trans” en estos países, y ya existen datos para enjuiciar resultados. 

Pero el presidente español es obediente y sigue las consignas, realiza todo lo que está en su mano y ejecuta una ingeniería social que tiene claros objetivos: reducción de la población mundial, destrucción de la familia, alteración de las bases antropológicas del individuo, atomizar a la población para realizar sobre ella el control más exhaustivo con las nuevas tecnologías.

Hay que exponer los horrores que la izquierda radical esconde tras esta ley, denunciar las consecuencias reales de la aplicación de esta ley, y también conocer la opinión de expertos, médicos, psicólogos e investigadores, y también de las personas con disforia de género. 

Y para esto hemos organizado una segunda parte de nuestro pasado Encuentro LA TRAMPA TRANS, titulado en este caso LOS TESTIMONIOS porque contaremos con dos personas con disforia de género que se sintieron engañadas por la “ola” trans. Son de Chile, pero podrían ser de Reino Unido, México, España o cualquiera de otros muchos países.

Son muchas las cuestiones, los debates, las razones para NO aprobar leyes trans, y menos aún de manera indiscriminada u obedeciendo a intereses políticos: la edad del sujeto a transexualizar, el bloqueo hormonal y el tratamiento hormonal, la cirugía  de amputación irreversible y de “transformación”, los tratamientos psicológicos y psiquiátricos, la eliminación de la homosexualidad a favor de la transexualidad, la desprotección  paterna ante un menor inducido a la transexualidad, la ocultación de los suicidios en las personas transexuales, las crisis de identidad  en los transexualizados, los falsos transexuales, la alteración de las condiciones personales en las competiciones deportivas, y la protesta de algunos grupos feministas por la “desaparición” de la mujer.

Ya en el pasado Encuentro, el Dr. Contreras, diputado de Vox, nos relató todos los pormenores de la ley Trans española. Ahora, la Dra. en psiquiatría María José Mancino, que repite, moderará a los dos invitados “transicionados”, preguntándoles sobre la propia realidad de la persona hormonada, la disforia de género, sus dificultades, etc. Santiago Hormazábal y Nael Condell son personas transexuales chilenas y activistas en la lucha para concientizar sobre la importancia de las terapias psicológicas antes que todo tipo de hormonización y de cirugías, en personas con disforia de género. 

También habrá una manifestación -y de ello nos hablarán desde HazteOir- que tendrá lugar este viernes en Madrid, a la que acTÚa FAMILIA se ha unido. Los lemas de la convocatoria son verdades como catedrales: «Les niñes” no existen, y Las mujeres no tienen pene.

En definitiva: nos quieren “robar el cuerpo”, pretenden alterar las raíces mismas de la identidad humana. Las leyes “Trans” son instrumentos que puede originar desastres psíquicos y amputaciones físicas irreparables en la vida de muchas personas, sobre todo niños y adolescentes.

Es urgente parar este sinsentido: stop a las Leyes Trans.

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