Un jerarca influyente no acude únicamente a los enemigos jurados de la Iglesia. Fue acompañado por el cardenal Francesco Coccopalmerio, ex presidente del Consejo Pontificio para los Textos Jurídicos, y el obispo Antonio Staglianò, presidente de la Academia Pontificia de Teología. Junto con los líderes de una secta semisecreta, deben discutir sobre el catolicismo y la masonería.
«Los masones estarán representados por Stefano Bisi, Gran Maestro del Gran Oriente de Italia, la logia masónica más grande del país, y los líderes de otras dos logias nacionales: la Gran Logia de Italia y la Gran Logia Regular de Italia». Informa Edward Pentin.
Como nos recuerda el periodista, el cardenal Coccopalmerio ocupaba el cargo de obispo auxiliar de Milán en la época en que el cardenal Carlo Maria Martini era jefe de esta archidiócesis. Este jerarca jesuita era cercano a los masones, que tras su muerte en 2012 le rindieron un cálido homenaje como «hombre de diálogo».
Por su parte, Riccardo Cascioli, redactor jefe del diario católico italiano La Nuova Bussola Quotidiana, llama la atención sobre el hecho de que la carta conciliadora del cardenal Gianfranco Ravasi de 2016 dirigida a los masones se convirtió en el punto de partida de una serie de reuniones conjuntas promovidas por las logias y algunas diócesis católicas.
Edward Pentin recuerda: desde el momento de la publicación de la bula de Clemente XII en Eminenti Apostolatus Specula en 1738, a los católicos se les prohibió unirse a los masones. El Vaticano ha emitido muchas declaraciones negativas contra la secta; en total, a lo largo de varios siglos, se han recopilado casi 600 documentos magistrales sobre este tema.
La Iglesia afirma que la masonería corrompe el cristianismo, practica rituales hostiles al catolicismo, sus principios son incompatibles con la fe católica y muestra fuertes tendencias anticatólicas», leemos en el blog de un apologista católico.
Uno de los documentos más famosos en la actualidad data de 1983. Está aprobado por el Papa St. Declaración de Juan Pablo II de la Congregación para la Doctrina de la Fe. Allí, el cardenal Joseph Ratzinger confirmó la «evaluación negativa» de la Iglesia sobre la masonería, señalando que se mantuvo «sin cambios» porque los principios masónicos «siempre han sido considerados incompatibles con la doctrina de la Iglesia y, por lo tanto, la membresía [en la masonería] sigue estando prohibida».
Los fieles que se unen a asociaciones masónicas se encuentran en estado de pecado grave y no pueden recibir la Sagrada Comunión», añadió el cardenal Ratzinger. Sin embargo, ni esta declaración ni el Código de Derecho Canónico de 1983 imponían a los católicos pertenecientes a asociaciones masónicas la pena de excomunión, que estaba en vigor desde la bula papal de Clemente XII.
A pesar de esto, pertenecer a una logia todavía está oficialmente prohibido en la Iglesia católica, y en noviembre el Dicasterio Vaticano para la Doctrina de la Fe publicó un documento que confirma que los católicos no pueden ingresar en logias», subraya Edward Pentin.
Así mismo, el Canal de Youtube Católico con más de 1.25 millones de suscriptores, Tekton Centro Televisivo, subió el pasado 19 de febrero un análisis y opinión contundentes basados en los hechos recientes ya mencionados, así como un análisis retrospectivo a algunos documentos pontificios y declaraciones eclesiales que condenan la masonería, así como lo que representa para un católico el simpatizar o pertenecer a la masonería. Por supuesto, se hace énfasis en lo ya declarado por Benedicto XVI en cuanto que la Iglesia Católica y los «valores» masónicos son incompatibles en su totalidad. Vale la pena escuchar el análisis completo.
No hemos de olvidar también el documento emitido por el Dicasterio de la Fe, encabezado por el cardenal Victor Fernández, en donde afirma que «quienes formal y conscientemente sean miembros de logias masónicas y hayan abrazado los principios masónicos, quedan comprendidos en las disposiciones presentes en la Declaración de la Congregación para la Doctrina de la Fe de 1983 (y también las lineas guía publicadas por la Conferencia Episcopal en 2003, disposiciones que de manera certera reitera que los católicos inscritos en logias masónicas se encuentran «en estado de pecado grave», y serán penados con la excomunión. Estas medidas se aplican también a cualquier eclesiástico registrado en la masonería».
Es importante también siempre tener presente la existencia de más documentos pontificios de la que condenan la masonería promulgados desde el siglo XVIII:
- Clemente XII – Primer decreto papal en contra de la Masonería: bula In Eminenti Apostolatus Specula o In Eminenti.- 1738
- Benedicto XIV – Providas romanorum – 1751
- Pío VII – Ecclesiam a Jesu Christo – 1821 – Este documento entre otras cosas dice que los francmasones han de ser excomulgados, por sus conspiraciones contra la Iglesia y el estado.
- León XII – Quo Graviora – 1826
- Pío VIII – Traditi Humilitati – 1829
- Gregorio XVI – Mirari Vos – 1832.
- Qui pluribus – 1846.
- Quibus quantisque malis – 1849
- Quanta cura – 1864
- Multiplices inter – 1865
- Apostolicæ Sedis – 1869
- Etsi multa – 1873
- Etsi Nos – 1882
- Humanum genus – 1884 – Encíclica
- Officio sanctissimo – 1887 – Encíclica
- Ab Apostolici – 1890 -Encíclica, publicada también en italiano: Dall’alto dell’Apostolico Seggio
- Custodi di quella fede – 1892 – Encíclica
- Inimica vis – 1892 – Encíclica
- Praeclara Gratulationis Publicae – 20 de junio de 1894 – Carta apostólica
- Vigésimo quinto anno, también conocida como Annum ingressi – 19 de marzo de 1902 – Carta Apostólica
ROM.
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