«Los asuntos temporales, tarea de fe»

Guillermo Gazanini Espinoza
Guillermo Gazanini Espinoza

Conviene que busquemos vivir como si todo fuera de nuestro interés; no interesarnos únicamente por nuestra situación personal, sino abrir los ojos para apreciar la realidad en toda su complejidad y descubrir que juntos podemos ayudarnos de la fe para salir avante de cualquier peligro, problemática o situación adversa que tengamos que enfrentar. Evitemos el apego exagerado a cualquier tipo de reduccionismo material o propuesta propagandística que ofrece soluciones fáciles a problemas tan complejos como la inseguridad, la corrupción y falta de empleos bien remunerados.

Es necesaria y, hasta conveniente, una mirada trascendente. Consideremos con atención la reflexión y consejo de una carta cristiana que un desconocido autor del siglo II dirigió a un tal Diogneto: “Los cristianos viven cada uno en su propia patria, pero como forasteros; participan en todo como buenos ciudadanos, pero lo soportan todo como huéspedes de paso; toda tierra extraña es su patria y toda patria les es extraña”. Vivamos responsablemente con los pies en esta tierra, pero con el corazón en la Patria Eterna.

El desarrollo tecnológico que estamos viviendo es real pero efímero y transitorio. Los avances tecnológicos no deben ser cadenas que nos aten únicamente a esta tierra. Levantemos el vuelo hacia lo alto. Vivamos en la responsabilidad de cada día, haciendo lo mejor que podamos, pero sin olvidar una verdad fundamental: “No te inquietes cuando alguien se enriquece: cuando muera no se llevará nada” (Sal 49,17-18). Miremos a la eternidad cumpliendo nuestras responsabilidades personales y reconociendo los principales problemas que nos aquejan, para que juntos encontremos soluciones integrales hasta que México sea una nación solidaria justa y fraterna.

Pbro. Juan Beristain de los Santos

Comparte: