Para que no sea un triunfo pasajero, la acción reciente de la Corte que votó en contra un proyecto que pretendía abrir las puertas a la legalización del aborto en el país, laicos y colectivos pro vida y familia, deben permanecer con campañas de oración, Santo Rosario, rezo del Ángelus y una participación activa en redes sociales mediante los hashtags #MexicoEsProvida, #CorteAbortoNo, #SalvemosLasDosVidas.
Podemos decir que hoy hemos ganado la batalla, que triunfó la vida, sin embargo, sabemos que sigue amenazada. ¡Tenemos que seguir defendiéndola!,
determinó la Diócesis de Coatzacoalcos.
Exhortó a los fieles católicos y personas de buena voluntad, a no abandonar sus jornadas de oración, ayunos y/o sacrificios en bien de los más indefensos, “dándoles voz con nuestras plegarias”.
Recordemos que estamos llamados a defender, cuidar y promover el respeto de la vida humana desde su gestación hasta la muerte natural, ya que es un don divino y humano, una riqueza para toda la sociedad,
agregó en su comunicado.
El documento de una cuartilla, bajo el título: “La vida ha vencido a la muerte”, que firma el P. Lázaro de Jesús Caraveo Carrera, coordinador diocesano de Medios de Comunicación, refiere que “Por hoy, hemos ganado la batalla”, pero “nuestro compromiso es cuidar, defender y promover la vida, este es permanente, pero se debe manifestar, especialmente cuando más peligro corre”.
El presbítero aseveró que Veracruz está blindado con el artículo 4° que, citó:
El Estado deberá garantizar el derecho a la vida del ser humano, desde el momento de la concepción hasta la muerte natural, como valor primordial que sustenta el ejercicio de los demás derechos…,
proclamada el 23 de agosto de 2016.
Por último, dijo que, dentro de su labor pastoral,
nos promulgamos a favor de la vida, mediante campañas del rezo del Santo Rosario, Horas Santas, Eucaristías;
ello, tras recordar la iniciativa de las 40 Campanadas por la Vida, realizada el 28 de julio en punto de las 12:00 horas., en la que cada una de las parroquias que comprenden el territorio diocesano repicaron sus campanas llamando a sus fieles a la oración y al rezo del Ángelus.
