La paciencia mantiene viva la esperanza

Ruan Ángel Badillo Lagos
Ruan Ángel Badillo Lagos

En la era del Internet, donde el espacio y el tiempo son el aquí y el ahora, la paciencia resulta una cualidad extraña. Ya no se tolera ni se soporta sin lamentarse. La paciencia es un rasgo de la personalidad, es la virtud de quien sabe sufrir y tolerar las contrariedades y adversidades de la vida con fortaleza y sin lamentos, ya que es una virtud que todos, sin excepción, tenemos que poner en práctica, por lo que es conveniente reencontrase con esta virtud que nos hace mucho bien a nosotros mismos y a los demás con quienes convivimos cotidianamente, porque ella subraya la importancia de perseverar en la confianza aquello que Dios nos ha prometido, dándonos ejemplo de que Dios es paciente con nosotros. 

La paciencia mantiene viva la esperanza y la va consolidando poco a poco hasta formar un estilo de vida. Para llegar a este estilo de vida se atraviesa por un camino que también necesita momentos fuertes de aprendizaje, con el fin de afianzar la esperanza. La vida está hecha de alegrías y dolores, el amor se pone a prueba cuando aumentan las dificultades, ahí es cuando la esperanza parece derrumbarse frente al sufrimiento. ¿Por qué es importante mantener la esperanza y hasta reírnos en los momentos malos? Reír en los malos momentos te permite desdramatizar detenidas situaciones a las que puedes estar dándoles demasiada importancia, por ello, además de sentir el enojo y la tristeza, también te puedes reír o, más bien, gloriarte de tu sufrimiento. Esto es un desafío que debemos afrontar sin barreras ni confines. La esperanza produce la gloria porque está fundamentada en el amor que nunca falla; en efecto, nuestra vida debe estar animada por la esperanza que se renueva siempre. Esta se hace inquebrantable por Dios, ya que en el corazón de toda persona se encuentra la esperanza. San Agustín escribe al respecto: “nadie, en efecto, vive en cualquier género de vida sin estas tres disposiciones del alma: creer, esperar y amar”.

Con la esperanza que no falla se puede afrontar nuestro presente, aunque sea un presente en dificultad. Se puede vivir y aceptar si caminamos hacia una meta pues el camino implica esfuerzo. La vida no siempre es producto de las leyes naturales, sino que en todo y por encima de todo hay una voluntad personal y si tomas la mano de Dios, ¡ya la hiciste! En esta realidad las personas necesitan saber esperar y soportar pacientemente las pruebas para alcanzar las promesas y consolidar los proyectos. Esto consiste en una esperanza vivida, una experiencia basada en la certeza de la esperanza porque asume y da significado a la vida, “se espera a las realidades futuras a partir de un presente entregado”, quien no arriesga no gana. Finalmente, cuando se experimenta soledad y sentimientos de abandono, hay que recordar que somos un tesoro lleno de esperanza por las experiencias vividas, sabiduría de la vida que se ofrece a la familia, a la comunidad y a la sociedad. Los abuelos y abuelas que representan la trasmisión de la esperanza de la vida a las nuevas generaciones deben manifestar que la esperanza nunca falla, que el vínculo del amor de los nietos debe permanecer en unidad y con esperanza, porque la paciencia mantiene viva la esperanza.   

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Originario de Papantla de Olarte, Veracruz; casado una sola vez y padre de una familia conformada por cuatro hijos. Pensador, reflexivo y analítico sobre la realidad del mundo contemporáneo; promotor del bien común, de la justicia social y de la dignidad de las personas. Creador del Método de Estilo Educativo Único (MEEU); formación como profesor de educación primaria, maestro, directivo de diferentes instituciones, fundador de la escuela Tierra y Libertad, pedagogo nato y matemático. Ha sido asesor técnico del cuerpo directivo y es miembro ejecutivo de la Asociación Civil Formando para la Vida; liturgo, laico católico comprometido, comunicador de la belleza y grandeza de la presencia real y gracia de Dios. Escritor, autor de diferentes libros: Experiencia de un alma, RUAH y Los secretos de mi alma. Actualmente, tiene un programa de radio por Internet titulado “Identidad Católica”, en RADIO Kirios El centro de la radio. También es coordinador de la comunidad “Nueva Jerusalén”, tenista y socio activo del Club Britania.