1. Uno de los signos más característicos de la Iglesia actual es el llamado pastoralismo .
Es decir, una especie de deriva pastoral . Es decir, pastoral en el sentido propio de la palabra es la aplicación de la doctrina con el fin de darla a conocer y ponerla en práctica. Pero cuando se convierte en pastoralismo , no sólo tiende a anular la doctrina , sino que incluso tiende a ser autosuficiente. Vamos a intentar entenderlo mejor:
2. La necesidad de custodiar la verdadera doctrina queda clara en las repetidas advertencias de los Apóstoles respecto a los incrédulos y los herejes.
Pablo escribe:
Vendrá un tiempo en que no soportarán la sana doctrina, sino que, conforme a sus propias concupiscencias, teniendo comezón de oír, se llamarán maestros; pero apartarán el oído de la verdad y se volverán a las fábulas». (2 Timoteo 4.3)
La pastoral debe pues estar al servicio de la doctrina .
Hoy, sin embargo, se da una paradoja: para algunos, la pastoral vale más que la doctrina . Y así, aquellos que no se alinean con el llamado cuidado pastoral, entonces resulta son sancionados…Mientras que los que cuestionan, ponen en duda la doctrina salen airosos (y en algunos casos incluso hasta son recompensados) .
De ahí que se esté viviendo dentro de la Iglesia una especie de “positivismo católico”: es decir que uno ya no está atado a la doctrina , sino a las decisiones de la autoridad. En efecto, resulta que la autoridad es concebida como «fuente» de verdad y no a su servicio,
3.¿Cuál es la causa de todo esto en breve?
La respuesta sólo puede ser “filosófica”. Por supuesto, el lector no debe preocuparse porque intentaremos ser sencillos y concisos:
El modernismo teológico separó la verdad cristiana de la metafísica .
¿Qué es la metafísica ? Es el estudio del ser en cuanto ser , es decir, del fundamento , es decir, de aquella verdad que no cambia , que juzga el tiempo sin transformarse en el tiempo.
Al separar la verdad cristiana de la metafísica , entonces, como consecuencia, la verdad cristiana ya no es tal y se traduce en práctica. Como consecuencia, la Iglesia misma, que debería ser la » sal de la tierra » (Mt 5) y que debería salvar la historia, es sustituida por la historia misma.
La Iglesia fue definida como el Cuerpo místico de Cristo , pero ahora se le pretende definir como un Pueblo en movimiento .
- En la primera definición la primacía es claramente la de la Verdad . Por tanto, estar en la Iglesia significa converger en el Credo .
- La segunda definición, Pueblo en movimiento , subraya en cambio la primacía de la praxis , del ser en la Historia. De ahí la importancia de sentirnos unidos no » in credendo » (es decir, en la Doctrina), sino » in agendo «, precisamente en la praxis, es decir, en el actuar.
4. Esto último explica por qué -hoy- si te equivocas, si cuestionas, si atacas la Doctrina milenaria católica, no te dicen nada, «todo está bien»; Ah…pero si no logras adherirte a diversas decisiones pastorales, eres un “hereje”.

Por CORRADO GNERRE.
CIUDAD DEL VATICANO.
ITRESENTIERI.