La constitución apostólica Praedicate Evangelium sobre la reforma de la Curia, publicada hoy, continúa (gracias a Dios) mencionando la «forma extraordinaria» en relación con el Dicasterio para el Culto Divino.
Llegará el momento de analizar el documento, pero de momento nos ha llamado la atención el n. 93:
«El Dicasterio se ocupa de la regulación y disciplina de la sagrada liturgia en cuanto a la forma extraordinaria del Rito Romano».
Mientras tanto, no era obvio, en un documento que probablemente permanecerá en vigor durante 20-30 años (el Bono Pastoral de San Juan Pablo II data de 1988), referirse a algo que la infame Responsa ha confirmado que quiere extinguir (OMS).
Además, el uso mismo del término «forma extraordinaria» permanece, a pesar de la misma Traditionis Custodes que considera la forma posconciliar como «la única expresión de la lex orandi». ¡Los cortocircuitos del Vaticano nos salvarán!
STEFANO.
CIUDADDEL VATICANO.
Misa en Latín.
