El Obispo de la Diócesis de Aguascalientes, Juan Espinoza Jiménez, compartió que ha observado que hay muchos niños en la calle a deshoras en todos los puntos donde hay antros y bares, y también hay multitud de jóvenes. “A mi esas personas me dan mucha compasión, ¿qué podemos hacer pro esos jóvenes? que bueno que se diviertan, que sean alegres, pero eso nos tiene que conmover, qué hacemos por la juventud para que la vivan en plenitud”.
Aseguró que «ahí está el caldo de cultivo para que jóvenes sean enganchados por quienes los llevan por caminos torcidos; el mundo está perdido porque hacen falta padres de familia atentos y que sean guía; él papá en la familia tiene una misión muy importante, pero tiene que sentir compasión de sus hijos no los puede dejar a la buena de Dios, tiene que hacer su tarea, ojala que los padres de familia sientan compasión por sus hijos, vean qué viven, qué sufren, qué hacen, ténganles mucho amor, traten de evitar divisiones y separaciones, acérquense corríjanlos con amor y firmeza”
Lo anterior, en su Homilía de Misa Dominical ofrecida en Catedral Basílica, y en el marco del Día del Padre, donde aprovechó para hacer mención de los adultos mayores, quienes tienen ya encima el peso de los años, según aseguró; están muy desprotegidos, por lo que hay que poner atención en ellos y darles el amor y cubrir sus necesidades en todos los sentidos, en esta etapa en la que ya sólo están para recibir.
Me da mucha compasión ver a los ancianitos, que luchan en la vida, que vienen con su carriola o su silla de ruedas, ninguna persona que sufre debe ser indiferente para nosotros, Dios no llama como llamó a los apóstoles, a cada uno nos llama por nuestro nombre, a hacer algo, quiere que nosotros colaboremos en el anuncio del evangelio donde no se necesitan solamente palabras, sobre todo acciones, hay que curar las heridas del corazón, hay que estar cercad e los enfermos y no solo hay enfermos físicos, hay muchas personas con padecimientos mentalesJuan Espinoza Jiménez, Obispo de la Diócesis de Aguascalientes
De esta manera el Obispo Espinoza Jiménez hizo su llamado semanal, enfocando a los fieles a curar las heridas del corazón y expulsar de una vez por todas los demonios del odio, la violencia, el rencor y el coraje, con lo que finalizó discurso.
Por Rebeca Aguilera.
Aguascalientes.
El Sol del Centro.