Generó conmoción en la ciudad el descubrimiento del cadáver de un indigente que previamente fue sacado de una iglesia, a petición del sacerdote que atiende el templo, mediante el uso de «diablos» o «diablitos».
En efecto, el indigente ingresó a la Catedral Maronita de México, se veía enfermo y pedía ayuda. El sacerdote llamó al servicio de paramédicos, pero el indigente rehusó tal asistencia. Entonces, el sacerdote solicitó ayuda a los trabajadores de la zona, quienes utilizaron «diablos» para sacar al hombre de la iglesia. Y al otro día apareció ya muerto en las afueras del templo.
Guillermo Guevara, de La Prensa, indica que ayer por la mañana, «comerciantes ambulantes de la calle republica de Uruguay dieron aviso a las autoridades, sobre el hallazgo de un hombre que se encontraba tirado sin reaccionar sobre la banqueta, al lugar arribaron paramédicos del ERUM (Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas) quienes efectivamente encontraron a un sujeto de entre 55 y 60 años de edad, el cual vestía sudadera color gris, pantalón de mezclilla y tenis azules, determinando ausencia de signos vitales.
Según testigos de los hechos, el hombre que permanece en calidad de desconocido, ya tenia varios años deambulando por la zona pues años a tras se ganaba la vida como diablero».
Por su parte, «El Universal Gráfico» complementa la información la información, al detallar que de forma previa el sacerdote maronita, después de que el hombre rechazo ser atendido por los paramédicos, lo había hecho sacar del templo, auxiliado por trabajadores de la zona, mediante un «diablo»:
CIUDAD DE MÉXICO.
MIÉRCOLES 18 DE DICIEMBRE DE 2024.
LA PRENSA/EL GRÁFICO.
