Hacer la voluntad de Dios significa entregarle mi voluntad

Psic. Octavio Escobar
Psic. Octavio Escobar

Cuando las cosas no van como queremos y sentimos que todo es difícil, debemos recordar que Dios solo nos da las cargas que sabe que podemos soportar. Y así como las cosas son buenas o malas, según con el cristal con que se las mira, Dios nos invita a que confiemos plenamente en Él y pongamos en práctica la frase de Santa Teresa de Ávila que dice “nada te turbe, nada te espante”.

Partiendo de ese principio de confianza y entrega a la voluntad de Dios, podemos ver que todo es posible y debemos confiar en las palabras del Padre Nuestro que dicen, “hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo”. Este proceso de entrega a la voluntad de Dios se perfecciona cuando le entregamos nuestra voluntad plenamente, porque realmente Él sabe lo que es bueno para nosotros.

No seamos como esos siervos malos e inútiles que quieren hacer su voluntad y después se preguntan por qué las cosas no salen de acuerdo a sus planes. Entendamos que confiar en Dios es la clave con la que los profetas, la Virgen María y todos los santos han logrado grandes obras en Cristo.

El truco para confiar

No podemos esperar resultados diferentes si seguimos haciendo lo mismo. Es por eso que la única forma de ser santos hoy, es adaptando nuestra mirada de lo que es la santidad. No podemos esperar escalar una montaña enorme sin siquiera escalar los quehaceres de cada día con amor. Es así como Santa Teresita del Niño Jesús nos da su fórmula de amor y entrega en las pequeñas cosas. Eso también es confiar en Dios y nos permite hacer su voluntad en los pequeños trabajos de cada día.

Por eso hoy te invito a que uses este principio de hacer todo con amor. Además de ser muy poderoso, te permitirá tener una comunicación ininterrumpida con tu Padre que te ama y ofrecerle cada cosa que haces. Esto a su vez te enseñará a confiarlo todo en sus manos.

Truco psicológico

Mi aporte como psicólogo está en hacerte ver de qué forma puedes implementar la conducta de entregarle todo a Dios de la manera más simple. Por eso te invito a que pongas una alarma cada hora en tu celular para que cada vez que suene te regales un padre nuestro y un Ave María, con amor. Nada más que eso.

No te desesperes queriendo hacer 3 rosarios por día cuando aún te cuesta entregarle las pequeñas cosas. Empieza por pequeñas rutinas que te permitan ser consciente de todos los regalos que Dios te da, y verás como cada día la luz del Espíritu te va transformando.

Si quieres conocer más sobre cómo la psicología y la fe católica pueden ayudarte a acercarte a tu camino de santidad, te invito a que inicies el Diplomado Católico en Sanación Interior, en el que conocerás el camino para entregarte cada día un poco más a Dios, para que sea su Santa voluntad la que ordene tu vida. ¿Te animas?

Para comenzar envíame tu mensaje al +57 3104208041 e inicia ahora el proceso de sanación que ha cambiado la vida de miles de personas. ¡Te espero!

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Psicólogo Clínico de Colombia