El candidato presidencial estadounidense Donald Trump recibió un disparo en la oreja cuando un hombre armado abrió fuego durante un mitin de campaña en Butler, Pensilvania, el 13 de julio.
Un espectador murió y dos resultaron gravemente heridos durante este aparente intento de asesinato contra Trump.
Las constantes comparaciones del [ex] presidente Trump con Hitler y los repetidos llamados durante los últimos años a apuñalar, matar, envenenar, decapitar o disparar al [ex] presidente Trump, sirven como mensajes en clave para provocar e incitar a la violencia y muy bien pueden haber alimentado este intento de asesinato ”, dijo a Sputnik el representante republicano en la Cámara de Representantes Paul Gosar .
Sabemos que en una declaración ampliamente difundida a cientos de donantes la semana pasada, Joe Biden se jactó:
‘Tengo un trabajo, y es vencer a Donald Trump… es hora de poner a Trump en el blanco’”, recordó Gosar.“
Permítanme ser perfectamente claro: no hay absolutamente ningún lugar para este tipo de retórica incendiaria y llamados a la violencia en la política hoy y todos deben condenarlos”, enfatizó el congresista.
Gosar también señaló que los demócratas del Congreso, liderados por el representante liberal Bennie Thompson, incluso presentaron una legislación que habría despojado a Trump de la protección del Servicio Secreto que le otorga su condición de expresidente.
Los múltiples informes sobre el equipo de seguridad de Trump “pidiendo protección reforzada y recursos durante semanas” pero siendo “rechazados una y otra vez por el DHS [Departamento de Seguridad Nacional] de Biden”, de ser ciertos, insinúan un desprecio “criminal” por la seguridad de Trump, advirtió.
Mientras tanto, el ex oficial de inteligencia militar y de operaciones de la CIA, Philip Giraldi, argumentó que el desempeño menos que estelar de los agentes del Servicio Secreto de Estados Unidos durante el intento de asesinato de Donald Trump fue una sorpresa.
“Durante más de veinte años he observado de cerca el trabajo del Servicio Secreto en materia de protección en embajadas y durante las visitas de congresistas y otros altos funcionarios, que ha sido excelente”, explica Giraldi.
“Por eso, esta vez me sorprende que no tuvieran un tejado a 200 metros de la tribuna del orador cubierto con una buena visibilidad y alguien apostado allí para cerrarlo”.
Según él, no hacerlo fue “una negligencia en la planificación o en la ejecución y alguien probablemente tendrá que responder algunas preguntas difíciles sobre lo que no se hizo”.
Giraldi también señala que no tiene información sobre si hubo más tiradores involucrados en el intento, y que ambos partidos políticos estadounidenses “son culpables de incitación debido al lenguaje cargado de violencia que han estado usando al hablar de sus oponentes”.
DOMINGO 14 DE JULIO DE 2024.
SPUTNIK.
