* Francisco pretende mejorar las relaciones con los anglicanos a partir de la coronación del nuevo monarca. Pero ocurre un incidente vergonzoso.
Hay una gran expectación por la ceremonia de coronación del Rey Carlos III que tendrá lugar el 6 de mayo en la Abadía de Westminster en Londres. Entre los obsequios que llegaron a la casa de los Windsor para la histórica ocasión, probablemente el más preciado sea el enviado desde Roma. Así lo hizo el Papa Francisco quien, según confirmó la Oficina de Prensa de la Santa Sede, envió a principios de abril a Londres algunos fragmentos de la reliquia de la que se cree que es la verdadera cruz de Jesús, hasta ahora guardada en el Vaticano.
propósito ecuménico
En el comunicado oficial, el regalo del Papa fue descrito como un «gesto ecuménico para conmemorar el centenario de la iglesia anglicana en Gales». Los fragmentos ya han sido engastados en la cruz galesa que encabezará la ceremonia de coronación oficiada por el líder de la comunidad anglicana, Justin Welby. Cita las palabras galesas del último sermón de San David: » Sé alegre. Ten fe. Haz las cosas pequeñas «.
El obsequio fue apreciado por el arzobispo católico local, titular de Cardiff y Menevia, monseñor Mark O’Toole, para quien la cruz de Gales «no es solo un signo de las profundas raíces cristianas de nuestra nación, sino que, estoy seguro, nos alentará a todos a modelar nuestras vidas en el amor dado por nuestro Salvador, Jesucristo «.
Entrega
La Oficina de Prensa de la Santa Sede ha anunciado que el regalo ha sido entregado al rey Carlos III a través de la nunciatura apostólica en Gran Bretaña. Esta misma semana, Francisco nombró a monseñor Miguel Maury Buendía como su nuevo «embajador» en Londres , quien ocupó el lugar que dejó vacante a mediados de enero monseñor Claudio Gugerotti, quien llegó a Roma como prefecto del dicasterio para las Iglesias Orientales.
los fragmentos
La nota del director de la Oficina de Prensa no especifica dónde se guardaron en el Vaticano los fragmentos entregados por el Papa al rey, que también es jefe de la iglesia anglicana. Según la leyenda, la verdadera cruz del Gólgota fue encontrada intacta por Helena, madre del emperador Constantino, tres siglos después de la muerte de Cristo.
El Vaticano no es el único lugar que ha albergado y alberga presuntos fragmentos de la cruz de Jesús: también en Roma, en la basílica de Santa Croce in Gerusalemme hay una capilla de reliquias que alberga tres de ellas juntas así como un clavo de la crucifixión y dos coronas de espinas. El mismo privilegio también es reclamado por la Catedral de Pisa, de Florencia, por Notre Dame de París, en el tesoro del Hofburg en Viena.
La difusión de estos fragmentos por toda Europa , que comenzó en la Edad Media, dio lugar a un comentario despectivo de Juan Calvino según el cual » si se quisiera reunir todo lo encontrado, habría que cargar un gran barco » mientras » el El Evangelio testifica que la cruz sólo podía ser llevada por un hombre ”.
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No es la primera vez que un Papa dona un fragmento de lo que se considera la verdadera cruz: en el monte Križevac, en Medjugorje, se encuentra una enorme cruz desde 1933 y fue construida por los feligreses en 1933 para el Año Santo de la Redención. Para la ocasión, Pío XI envió una reliquia que contenía fragmentos de la basílica de Santa Croce en Gerusalemme. Pío XII, por su parte, entregó dos pequeños fragmentos al monasterio de Santo Toribio de Liébana, en España.
El canal con los anglicanos y el vergonzoso incidente
El regalo a Carlos III es un gesto de atención de Francisco en el contexto de las relaciones ecuménicas entre la Iglesia de Roma y la comunidad anglicana.
Informa que en la última semana se ha producido un sensacional incidente, después de que el martes en la archibasílica papal de San Giovanni in Laterano unos cincuenta miembros de la diócesis anglicana de Fulham -encabezados por su obispo- celebraran su liturgia en el altar de la cátedra. El Cabildo de Letrán, con una declaración del vicario capitular, monseñor Guerino Di Tora, redactó una nota en la que expresaba su » profundo pesar por lo ocurrido » explicando que » el lamentable episodio se produjo por falta de comunicación «.
(Es decir, los anglicanos no solo celebraron «misa» en la Basílica del Papa, obispo de Roma, sino que además ocuparon indebidamente el lugar destinado al Vicario de Cristo para impartir cátedra, en el altar mayor de la catedral de Roma, contraviniendo las normas canónicas.
(Los anglicanos se separaron de la Iglesia Católica Romana en 1534, cuando se denegó al rey inglés Enrique VIII la anulación de su matrimonio. A partir de ese momento no solo se desconoció al papado por parte de los anglicanos, sino que se persiguió y acabó con la vida de clérigos y laicos fieles a Roma).
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Nico SpuntoniDomingo 23 de abril de 2023.
Comentarios
HARIES
hace 19 minutos – 17:36.- Si de verdad quisiéramos ser honestos, ¿cómo es posible regalarle una reliquia súper sagrada a un cabeza de iglesia que no se portó bien con su ex mujer, la princesa Diana?… Y luego, dejando de lado los asuntos estrictamente íntimos y familiares, un regalo religioso de este nivel debe servir para que Inglaterra renuncie a la beligerancia en el conflicto Rusia-Ucrania. Ya veremos. Si de lo contrario. el Rey continúa enviando gran cantidad de armas para la guerra en Ucrania, entonces el Papa debería pedir que le devolvieran la reliquia.
Anglicanos violan ley católica y celebran «misa» en altar principal de la catedral del Papa
El que oficio la «misa» es un masón confeso, divorciado vuelto a casar.
ABRIL 20, 2023 17:00
CIUDAD DEL VATICANO.
(ZENIT Noticias / Roma, 20.04.2023).- El martes 18 de abril, un grupo de unos 30 clérigos anglicanos (la confesión cristiana separad de Roma tras la negativa del Papa a la declaración de nulidad entre Enrique VIII y Catalina de Aragón), tuvieron una «misa» anglicana en el altar principal de la catedral de Roma, la sede del Papa, quien es Papa precisamente porque es obispo de Roma.
El «obispo» celebrante fue Johnathan Baker, pastor anglicano de Fulham desde 2013. Una fuente consultada por ZENIT confirmó que el clero anglicano y este «obispo» se encuentran en Roma realizando un retiro espiritual. El lugar de alojamiento para el grupo es el Venerable Colegio Inglés, un seminario católico para estudiantes de lengua inglesa procedentes del Reino Unido.
De acuerdo a una norma de 2020 del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, se puede «ofrecer a otras comunidades cristianas el uso de una iglesia» si el obispo diocesano discierne «que no causará escándalo o confusión a los fieles». Sin embargo, la misma norma indica que si se trata de la catedral se prevé un discernimiento particular.
Por su parte, el Directorio Ecuménico prevé que se preste un lugar de culto a otras comunidades cuando estas carezcan de lugar. En Roma, sin embargo, los anglicanos tienen un lugar de culto propio.
La persona del obispo Baker suscita, además, perplejidad debido a que es masón confeso (lo reveló él mismo en 2011: «durante muchos años he sido un miembro activo y continúo siéndolo»). También es divorciado vuelto a casar venido a «obispo».
La tarde romana del jueves 20 de abril, el Cabildo de la catedral de San Juan de Letrán emitió un comunicado en el que dice:
«El Cabildo Lateranense, en la persona de Su Excelencia Mons. Guerino Di Tora, Vicario Capitular, expresa su profundo pesar por lo ocurrido el pasado martes 18 de abril en el interior de la Basílica de San Juan, en Roma. De hecho, un grupo de unos 50 sacerdotes, acompañados por su obispo, todos pertenecientes a la comunión anglicana, celebraron en el altar mayor de la catedral de Roma, contraviniendo las normas canónicas. Monseñor Di Tora también explicó que el lamentable episodio se debió a un defecto de comunicación».
Por cuanto refiere I-MEDIA, otra confesión cristiana que no está en comunión con el Papa usará también la catedral de San Juan de Letrán en mayo próximo cuando el Patriarca copto Tawadros II celebre ahí su «misa».
