La pertenencia de Biden a la masonería es un nuevo desafío para los líderes católicos estadounidenses (…) porque el Papa Francisco y sus colaboradores más cercanos están en contra de la masonería, señala Simon Caldwell en el British Catholic Herald.
El domingo 19 de enero de 2025, el expresidente de Estados Unidos se convirtió en miembro de la logia Prince Hall Family. Los masones señalaron que el presidente Joe Biden durante su mandato expresó «los valores fundamentales de la Muy Venerable Gran Logia de Prince Hall […] incluyendo el amor fraternal, el cuidado y la verdad».
Caldwell señala que la Iglesia católica considera que la membresía en la masonería es contraria a la fe católica. En la Declaración sobre las Asociaciones Masónicas emitida en 1983, la Congregación para la Doctrina de la Fe (KNW) afirmó que la membresía en ellas no estaba permitida bajo ninguna circunstancia.
«La valoración negativa de la Iglesia sobre las asociaciones masónicas permanece inalterada porque sus principios siempre han sido considerados incompatibles con la doctrina de la Iglesia y, por tanto, la pertenencia a ellas sigue prohibida», se lee en el texto de la declaración. Los fieles que se unen a asociaciones masónicas «se encuentran en estado de pecado grave y no pueden recibir la Sagrada Comunión».
Hace apenas dos años, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe (DDW), dirigido por el protegido de Francisco, el cardenal. Víctor Manuel Fernández, confirmó el decreto de 1983, afirmando que «la membresía activa de los fieles en la masonería está prohibida debido a la irreconciliabilidad entre la doctrina católica y la masonería».
«La pertenencia de Biden a la masonería plantea un nuevo desafío para los líderes católicos estadounidenses en el caso de que continúe recibiendo la Sagrada Comunión, porque el Papa Francisco y sus colaboradores más cercanos se oponen a la masonería», señala el columnista.
El DDF confirmó el fallo contra la masonería en respuesta a una pregunta planteada por el obispo Julito Cortés de Dumaguete en Filipinas sobre el «aumento continuo del número de creyentes matriculados en la masonería» entre los católicos filipinos.
El obispo Cortés pidió sugerencias al prefecto de DDW sobre cómo abordar este tema pastoralmente, teniendo en cuenta «las implicaciones doctrinales de este fenómeno». El cardenal Fernández dijo que quienes están formal y conscientemente inscritos en logias masónicas han aceptado los principios masónicos y por tanto están sujetos a lo dispuesto en la declaración de 1983.
CIUDAD DEL VATICANO.
JUEVES 30 DE ENERO DE 2025.
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