Con quirógrafo fechado el 15 de agosto de 2023, el Sumo Pontífice instituyó la Universidad del Sentido . Es una «institución educativa universitaria civil con sede en el Estado de la Ciudad del Vaticano«
Gastar dinero y no servir
Como suele hacer, Francisco participó personalmente en los momentos más destacados de la vida de esta institución. En mayo de 2021 acudió a la Universidad Pontificia Urbaniana para lanzar el Movimiento.
Una vez más el Papa trae sus creaciones y sus alumnos a este Estado. El significado, de hecho, de esta universidad no está muy claro. Estamos llenos de facultades de teología en el mundo que están pobladas de profesores altamente recomendados y mal capacitados, en Roma tenemos una serie de universidades pontificias que gotean por todos lados, Francisco estáahora construyendo la universidad del «Papa», al mismo tiempo, sin embargo, que está colocando a muchas otras bajo la vigilancia de un comisionado. Y en medio de todo ello da vida a una universidad «de sentido».
En un comunicado difundido por Scholas Occurrentes , el Papa afirma que: “Scholas, como comunidad que educa, como intuición que crece, abre las puertas de la Universidad del Sentido, con estudiantes de todas las realidades, lenguas y credos, para que que nadie quede afuera cuando lo que se enseña no es una cosa sino la vida misma.»
Una vez más sólo nos queda preguntar: ¿quién paga? ¿de dónde se obstendránrecursos para eda nueva universidad? ¿ Cuál es el punto de todo esto? ¿Queremos hacer como los cursos del Centro Aletti, que fueron fuertemente patrocinados por Busca, Rupnik, Morandi y compañía pero no proporcionaron ninguna calificación utilizable? ¿Queremos hacer como la escuela de Artes y Oficios de la Fabbrica di San Pietro que no sirve más que para contratar amigos?
Después de todo, Mauro Gambetti y el Papa coinciden en algo: en el Vaticano, hacer todo lo que no se les permitiría hacer en ningún otro Estado. El primero ha creado una Fundación que en Italia no le habrían permitido abrir, porque ni el objetivo ni la finalidad están claros. El segundo funda una “Universidad del Sentido”, algo por lo que en Argentina generaría fuertes cuestionamientos.
¿Acaso era demasiado difícil establecer una universidad seria que pudiera dar protagonismo a este Estado y ser un motivo de orgullo a nivel mundial? No nos queda más que abrir el breviario y recitar: «¿ Hasta cuándo, Señor?».
Por LM.
Ciudad del Vaticano.
Silere non possum.
