Introducir el llamado Rito Maya es un paso en falso.
La liturgia no debe estar sujeta a tales cambios, sobre todo porque en este caso existe el riesgo de influencias paganas, aseguró monseñor Héctor Aguer, quien añadió:
La liturgia representa la vida interior de la Iglesia, su esencia: el culto al Dios Trino en el que se cumple el primer mandamiento; recrear el misterio pascual de Jesucristo; transmitiendo la gracia del Espíritu Santo durante la celebración de los sacramentos».
En Occidente muchos jóvenes se sienten atraídos por la tradicional Santa Misa por su seriedad y belleza. En Oriente, los ritos litúrgicos nunca fueron cambiados como lo hizo el Papa Pablo VI con el rito romano; a lo sumo, el idioma local fue adoptado hasta cierto punto en la liturgia.
El actual Ordo Missae se caracteriza por la variabilidad y contiene numerosos abusos. Un campo de experimentos especiales es la música, en la que se abandona el canto gregoriano y se introduce el uso de instrumentos populares», afirmó.
Ahora se ha dado otro paso en falso: la aprobación del ‘Rito Maya’ otorgado a México. Se trata de la «incorporación» al rito de la Misa de elementos paganos, ricos encantamientos, la participación de mujeres que actúan como si fueran sacerdotisas, música popular ajena al ambiente religioso, aplausos y bailes. ¿Qué queda de la Eucaristía cristiana?
El anuncio de esta decisión es el punto de partida para la transformación de la liturgia católica, actualmente destrozada, en la abolición del culto divino. ¿A qué dios está dirigido el «ritual maya»? – preguntó retóricamente.
Al final, el Arzobispo Héctor Aguer pidió oraciones por la Iglesia de los Niños de Fátima, Francisco, Jacinta y Lucía.
Monseñor HÉCTOR AGUER.
Jueves 28 de noviembre de 2024.