De igual manera, se le mantiene en un coma inducido, con objeto de evitar un daño mayor, tanto sus vías respiratorias como a sus propios pulmones, derivado de la presencia invasiva por la prolongada conexión a un respirador mecánico.
Este mismo estado de coma inducido, permite a sus órganos internos realizar un esfuerzo mínimo para mantener las funciones vitales de su cuerpo y concentrarse en la recuperación.
Mediante el reporte oficial, el presbítero Pedroza González explica que, dentro de la gravedad de su estado, se registra un nuevo periodo de muy lenta mejoría, que permite albergar esperanzas.
Insistió a los fieles católicos para que, dentro de sus diarias oraciones, no olviden pedir por la mejoría del jefe de la iglesia católica en Aguascalientes, al tiempo que, hizo un llamado para que, de igual manera se ore por los médicos que lo atienden, así como por el resto de los enfermos que deben enfrentar una dura prueba de vida a causa de la pandemia.
El obispo diocesano, José María de la Torre Martín, cumpla ya un mes y seis días de permanecer hospitalizado en estado grave, luego de haber sido afectado por el coronavirus Covid-19, enfermedad que se complicó, dada su edad y otras enfermedades que hace años venía arrastrando.
A los pocos días de su llegada al nosocomio civil donde se encuentra, debió ser intubado e inducírsele el coma. Ha tenido varios altibajos, con episodios de muy lenta mejoría, seguidos de estancamiento, así como una cirugía de tráquea, realizada para permitir un mejor paso del aire. También se mantiene con una continua hemodiálisis.
36 Días tiene ya hospitalizado el obispo De la Torre Martín.
Coninformación de El Sol de Centro/Mario Luis Ramos