* El ataque en dos iglesias de Algeciras se investiga en la Audiencia Nacional como un caso de terrorismo.
Yasin Kanzaa, el magrebí armado con un machete que ha matado el miércoles por la tarde al sacristán de la Iglesia de La Palma de Algeciras, y herido a otras cuatro personas, posiblemente tenía como objetivo al párroco de la iglesia, que no se encontraba en ese momento en el lugar de los hechos.
Así lo cree el párroco de la Iglesia de La Palma de Algeciras (Cádiz), Juan José Marina: «En vez de morir yo, ha muerto él«, se ha lamentado en declaraciones a EFE.
Según ha contado Marina, el marroquí llegó a la Iglesia de La Palma cuando se había acabado la eucaristía y el sacristán, Diego Valencia, se encontraba recogiendo la mesa del altar, mientras algunos feligreses continuaban rezando. «Entonces este hombre entró por la puerta dando gritos, se dirigió al sacristán. Él le dijo que iba a llamar a la Policía y ahí le dio el primer machetazo», cuenta el párroco.
El sacristán logró salir de la iglesia, posiblemente para pedir ayuda, pero el atacante le alcanzó y acabó con su vida. Algunos vecinos grabaron al marroquí con el machete después de asesinar al sacristán.
Juan José Marina había celebrado misa en otra iglesia, y un compañero la había celebrado en su parroquia poco antes de que sucediera el ataque.
El ataque, que tuvo lugar alrededor de las 19:30 horas, está siendo investigado por la Audiencia Nacional como un caso de terrorismo. Según fuentes jurídicas que cita Efe, el atacante habría gritado «¡Alá!».
JUEVES 26 DE ENERO DE 2023.
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