La mañana de este miércoles, la Iglesia Católica dio a conocer el fallecimiento del presbítero, Ausencio Hernández Acevedo, quien era el encargado del templo del Perpetuo Socorro en Huajuapan, sumando a la fecha ocho sacerdotes pertenecientes a la Diócesis de Huajuapan que han perdido la vida.
El encargado de la Pastoral de las Comunicaciones Sociales en la Diócesis de Huajuapan, Alejandro Rojas, informó que el deceso ocurrió a las 9 de la mañana y no se conoce la causa de su deceso, sino hasta que se conozca el parte médico; pero dijo que, al parecer, fue una descompensación de la presión arterial.
Explicó que se están tomando las decisiones respectivas y los familiares del finado han decidido que sus restos sean trasladados a su localidad de origen, Santiago Cacaloxtepec, a unos 12 kilómetros de la Ciudad de Huajuapan, donde serán sus funerales.
Consideró que a la iglesia católica le preocupan los decesos de los ciudadanos en general y de los sacerdotes en particular por diferentes enfermedades, “pero es algo preocupante y es algo que nos está haciendo reflexionar a los sacerdotes sobre el cuidado de nuestra salud. A lo mejor nos hemos descuidado en tomar las precauciones y la atención que se debe uno dar, por lo que es necesario hacerse los chequeos necesarios de la salud, porque de repente puede uno enfermarse”.
Pidió que los fieles oren por el descanso del sacerdote fallecido, y señaló que el sacerdote Nemecio Ausencio Hernández Acevedo, fue ordenado sacerdote el 23 de agosto del año 1970 y recientemente celebró sus 50 años como sacerdote.
“Era encargado, al momento de su muerte, del templo del Perpetuo Socorro ubicado en Antonio de León 8 en Huajuapan desde el año 2012; participaba en los medios de comunicación de la Diócesis desde el año 2010; era asesor de la Diócesis desde el 2012, fue párroco del Sagrario Diocesano, y de diferentes templos de la demarcación católica”,
apuntó.
Asimismo, dijo, fue profesor del Seminario Diocesano de Huajuapan, su alma mater, en las materias de Humanidades, Filosofía y Teología. Asimismo, participó en su juventud en actividades deportivas, teatrales y fue integrante del orfeón del seminario.
“Hernández Acevedo hablaba el mixteco, el español y el latín, fue de familia humilde, como él mismo lo relataba, y tuvo la vocación desde sus primeros años de educación, cuando tuvo que trasladarse a estudiar el complemento de la educación primaria, ya que solo había hasta tercer grado en Cacaloxtepec, su lugar de origen”,
dijo.
Fue en Huajuapan donde decidió estudiar el sacerdocio en el Seminario de Huajuapan, ya que las otras dos carreras que le interesaban eran arquitectura y derecho, aseveró.
Con información de Diario Marca/Agencia IGAVEC