- A la visita anunciada como oficial por la presidencia le sigue la especificación de la Santa Sede: «En estudio».
- En realidad, la presencia del pontífice es segura, pero había que esperar el anuncio del Vaticano y el programa.
- Una fuga de rumores que la oficina del jefe de Estado quiso apaciguar con el sello oficial.
Ayer cayó el telón sobre un episodio inesperado sobre la esperada visita del Papa Francisco al Líbano, anunciada demasiado temprano el 5 de abril con un tuit de la cuenta oficial de la presidencia de la República. El Vaticano ha parcheado este temerario anuncio, propio de una manera superficial de hacer las cosas propia de los libaneses, con una aclaración del director de la Oficina de Prensa vaticana, Matteo Bruni, quien ha afirmado que el viaje es una «hipótesis en estudio».
Se lanzaron vehementes críticas a la presidencia de la República por haberse desviado del protocolo y haber difundido información que debía permanecer confidencial, a la espera del anuncio oficial de la Santa Sede. El jefe de Estado y su facción han sido acusados de haber explotado este anuncio con fines meramente electorales, para atribuirse el haber arrebatado al Santo Padre la concesión de una visita al Líbano.
En realidad, los hechos son «un poco distintos», revela una fuente diplomática europea, según la cual la filtración de información es atribuible a una «indiscreción» circulante que exime de toda responsabilidad a los servicios vinculados a la presidencia. Sin embargo, con tacto diplomático, pero no exento de cierta ambigüedad, los círculos vaticanos supieron redimir el paso en falso y retomar el balón de la iniciativa al anunciar que la visita aún es de «estudio», ya que aún no hay una fecha determinada. y ni siquiera un programa definido.
El viaje no se ve comprometido.
Sin embargo, la expresión «en estudio» no significa en absoluto que el camino apostólico se vea comprometido por la filtración de noticias. Prueba de ello es el hecho de cómo fue recibido durante la asamblea mensual de los obispos maronitas, reunidos ayer en la sede patriarcal de Bkerké con motivo del anuncio de la visita papal. En el preámbulo del comunicado publicado al final del encuentro, el colegio episcopal “se regocijó por el anuncio de la visita apostólica de su santidad el Papa Francisco al Líbano el próximo mes de junio”. “A la espera de que se definan los detalles del programa oficial de esta visita -continúa la nota- se pide a Dios que os bendiga y cumpla los deseos de su santidad el Papa, incluido el bien del Líbano y de los libaneses”.
«Tenemos plena confianza en que el Papa sabrá sorprender a todos», dijo ayer en L’Orient-Le Jour (LOJ) el obispo maronita de Batroun Mounir Khairallah, quien se aseguró de que «nadie sabe mejor que el Vaticano qué identidad y vocación histórica del Líbano en su entorno árabe”. “La visita se realizará con certeza”, confirmó sin lugar a dudas el prelado, al término de un encuentro dedicado al programa del viaje mismo y que se desarrolló en las oficinas de la nunciatura por la tarde. Según la fuente diplomática citada anteriormente, el anuncio de la fecha de la visita y el programa oficial se darán dentro de unos días.
Promesa
Recordamos también que el 5 de abril el nuncio apostólico en Líbano, Mons. Joseph Spiteri había informado al patriarca maronita y al jefe de Estado libanés que el Papa Francisco visitaría el Líbano en junio, aunque esta información se mantendría confidencial a la espera del anuncio de la fecha y el programa oficial en un momento posterior. Sin embargo, esta noticia había sido alimentada y relanzada de forma precipitada, obligando así a la presidencia de la República a dar un comunicado oficial, pudiendo contar con las promesas realizadas por el Santo Padre el pasado mes de marzo al presidente Aoun. Durante su reunión del pasado 21 de marzo en el Vaticano, el pontífice había confirmado personalmente su visita al Líbano, sin especificar la fecha. Por su parte, Aoun había ilustrado los «graves problemas socioeconómicos del país y la situación de los refugiados». Según una nota difundida al final de la reunión, también se habló de «la ayuda de la comunidad internacional, las próximas elecciones parlamentarias y las reformas necesarias» para «fortalecer la convivencia pacífica entre las diversas confesiones religiosas que viven en el Líbano».
Anticipándose a la próxima visita del Papa al Líbano, una fuente eclesiástica que siguió de cerca la reciente visita del pontífice a Malta subrayó que Francisco no olvidó referirse a ella durante un viaje a Oriente Medio. El Papa afirmó que la existencia misma de la isla, «el corazón del Mediterráneo», es una prueba de que podemos vivir en «una especie de convivencia de las diferencias», un tema que preocupa de cerca a los libaneses.
Por Fady Noun
BEIRUT, Líbano.
ASIA NEWS.
JUEVES 7 DE ABRIL DE 2022.
