* «Un hombre que se esfuerzó por contribuir a la armonía religiosa en la paz mundial», dijo.
El Dalai Lama se sintió conmovido por la muerte del Papa Emérito, Benedicto XVI, y dijo:
«Oro por nuestro hermano espiritual».
De la misma manera, reiteró su agradecimiento por el el encuentro que mantuvo en el Vaticano con el pontífice alemán, en 2006.
«Cuando tuve la oportunidad de conocer al Papa Benedicto, descubrí que éramos muy cercanos en el sentido de los valores humanos, de la armonía religiosa y del medio ambiente. Durante su pontificado, trabajó mucho para promover estos temas. Vivió una vida significativa.Creo que estos intercambios han contribuido a un mejor entendimiento religioso entre nosotros».
El registro del encuentro personal se remonta a octubre de 2006, cuando Benedicto XVI recibió al jefe de los budistas tibetanos en el Vaticano.
Como había hecho con Juan Pablo II, tenía una Audiencia no anunciada ni registrada en el boletín oficial vaticano, pero confirmada por la Oficina de Prensa.
Durante la amplia conversación, el Dalai Lama explicó en una coferencia posterior con los periódicos que Benedicto XVI tenía mucho de «valores humanos, armonía religiosa y medio ambiente». Hubo total armonía entre los dos en estos temas.
A cambio, no habría tenido que hablar de China, para evitar reacciones negativas con Pekín.
El Papa Francisco, en cambio, desde que tomó el trono de Pedro, cerró las puertas al Dalai Lama y trató de evitarlo por todos los medios.
Hasta ahora nunca querido recibirlo en el Vaticano.
Las solicitudes de todos los públicos se han ido liquidando con el tiempo, evidentemente para no tener problemas con los chinos, teniendo en cuenta que el Dalai Lama es el líder de un pueblo abofeteado por China.
No solo. Para no ofender al quisquilloso gobierno chino, hasta ahora el Papa Francisco nunca alzó la voz para denunciar las persecuciones en el Tíbet.
La posterior entrevista en La República al histórico secretario del Dalai Lama, Tethong, fueestruendo, cuando dijo:
«El Papa Francisco se niega a recibir a nuestro líder porque está negociando con Pekín el reconocimiento de los deberes de Roma» .
La realpolitik de Francisco se impuso a la defensa de los derechos humanos en el Tíbet.
Benedicto XVI, en contraste, expresó en reiteradas ocasiones “la tristeza y el dolor ante el sufrimiento de tantas personas” en el Tíbet y deseó que se eliminara el camino del diálogo.
“Los problemas se agravan con la violencia”, dijo Benedicno to XVI.
«Sigo con gran inquietud las noticias que están llegando desde el Tíbet en los últimos días. Mi corazón de padre siente tristeza y dolor ante el sufrimiento de tantas personas. Los invito a unirse a mí en la oración. Pedimos a Dios todopoderoso, fuente de luz, que illumine la mente de todos y les dé a todos el coraje de electir el camino del diálogo y la tolerancia».
Cuando Ratzinger dejó el papado en 2013, el líder espiritual de los tibetanos expresó su tristeza tras conocer su renuncia:
«Benedicto XVI es un practicante religioso ya la vez muy inteligente. Así que creo que su decisión debe haber sido realista, hecha para de alguna manera dar un mayor beneficio a las personas involucradas. Rezo para que el resto de su vida sea muy útil y beneficioso para todos.»
Por FRANCA GIANSOLDATI.
CIUDAD DEL VATICANO.
LUNES 2 DE ENERO DE 2023.