Les podemos asegurar que en los últimos días se acumulan las noticias en la mesa de la Comunidad de Lanceros. “Lo País” publicaba el sábado una noticia que decía que un cura se sentará en el banquillo, acusado de violar a otro durante 15 años.
No se refería a un caso antiguo en la diócesis de Salamanca sino a uno en la archidiócesis de Madrid que implica a uno de los sacerdotes más famosos de la archidiócesis. Llamativamente el periódico daba el nombre del victimario pero esconde el de la supuesta víctima, un exsacerdote secularizado que abandonó el sacerdocio después de haber tenido descendencia y que hoy se dedica al acompañamiento en determinados ambientes. La foto del periódico es del cardenal Cobito meteorito que algunos miembros de la Comunidad dicen que puede estrellarse con este tema.
Lo País dice que la supuesta víctima acudió al cardenal Osoro con la intención de renunciar al estado clerical. Después presentó una denuncia contra el supuesto victimario. En ningún momento se da la versión del victimario que se supone tendremos oportunidad de escuchar durante el juicio.
Un miembro de la Comunidad de Lanceros se pregunta cuál fue el papel del Padre Germán Arana en este caso y cuál de Osoro. Entre nuestros hermanos sacerdotes se comentaba que la sobreactuación de Osoro era una venganza contra el sacerdote supuesto victimario porque éste se había negado a abrirle la caja de una Fundación que presidía y de la que el clero de Madrid nos beneficiamos en grado sumo.
La pregunta que pone sobre la mesa otro miembro de la Comunidad de Lanceros es si es verdad que Osoro le facilitó la vivienda y el modo de vida a la supuesta víctima. La pregunta que nos seguimos haciendo es si el cardenal Cobo sigue protegiendo a la supuesta víctima y le sigue pagando la vivienda.
Lo País dice que el obispado sentenció los hechos probados después de una investigación interna de 2019. Si es verdad que el arzobispado, más bien Osoro, la Congregación para la Doctrina de la fe o quien fuera, investigó los espeluznantes hechos y concluyó que eran ciertos, alguien puede explicar por qué el sacerdote acusado sigue ejerciendo el ministerio como si nada. Otro miembro de la Comunidad sabe mucho sobre la supuesta víctima y es probable que otras personas también lo sepan.
La Comunidad de Lanceros
Por DIEGO LANZAS.
MARTES 4 DE FEBERO DE 2025.
MADRID, ESPAÑA,
INFOVATICANA-.