El cardenal Pell llegó a última hora de la tarde de ayer a Roma, después de tres años sin pisar la Ciudad Eterna. Tras ser absuelto por la Corte Suprema de Australia, el purpurado australiano, de 79 años, vuelve a su apartamento del Vaticano.
Al aterrizar en el aeropuerto Fiumicino de Roma, Pell fue asaltado por los periodistas a los que comentó que “es maravilloso volver a Roma”. El cardenal se dirigió directamente a su apartamento en los alrededores del Vaticano, donde una señora de Melbourne le estaba esperando para increparle, según recoge 9News. “Te odiamos, te odiamos”, dijo mientras pasaba el cardenal.
Según recoge Adnkronos, el Secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, ha comentado que el regreso de Pell, no tiene nada que ver con el asunto del escándalo Becciu. “Pell había pedido, tras su puesta en libertad, regresar a Roma. No hubo ninguna citación por parte del Papa. Él es quien pidió venir a Roma para cerrar su puesto, todavía tiene una casa aquí pero no sé qué planes tiene”, comentó el ‘número dos” del Vaticano.