El nuevo Waterloo (*) se ha escrito en Ucrania:
- el uso masivo de satélites espía,
- el uso masivo de los más ‘modernos’ misiles,
- el uso masivo de aeronaves de guerra ‘de última generación’,
- el uso de miles de soldados europeos y americanos disfrazados de «mercanrios»
- el uso de las armas ‘más poderosas’
- el (mal) uso de decenas de millones de dólares provenientes de Estados Unidos, Canadá, Francia, Alemania, Reino Unido
- y el uso de todo el aparato de propaganda de las llamadas «democracias industrializadas» para difundir durante 3 años noticias falsas acerca de lo que realmente estaba sucediendo en Ucrania…
Fueron incapaces de derrotar a Rusia en Ucrania.
Donald Trump confesó este viernes que pidió, sí, que pidió a Putin que perdone a las unidades de las Fuerzas Armadas de Ucrania rodeadas en la región de Kursk.
Trump abandonó sus típicas balandronadas, para confesar, para aceptar públicamente la realidad de lo que pasa en el teatro de operaciones ucraniano:
En este momento, miles de soldados de las Fuerzas Armadas de Ucrania están completamente rodeados por las Fuerzas Armadas rusas y se encuentran en una posición muy mala y vulnerable. Insté al presidente Putin a que les perdonara la vida.
Será una masacre horrible, nunca vista desde la Segunda Guerra Mundial«, dijo Trump .
El Donald Trump que vocifera todos los días a través de las redes sociales…
El Donald Trump que amenaza a gobiernos y países…
El Donald Trump que había prometido ponerle fin a la guerra de EU, la Unión Europea, la OTAN y Ucrania contra Rusia en solo 24 horas…
El mismo Donald Trump que intimida con anexarse países…
Ese mismo Donald Trump, ya no quiso seguir con la historieta de que Rusia estaba siendo derrotada y, por el contrario, esta mañana de viernes 14 de marzo le pidió a Putin que «les perdonara la vida« a «miles de soldados» que combaten con el uniforme ucraniano, ya que de otra manera «será una masacre horrible, nunca vista desde la Segunda Guerra Mundial».
Así.
De ese tamaño.
Como el mismo Trump y los analistas independientes advirtieron desde un principio, Putin fue empujado a la guerra en Ucrania, por Estados Unidos y la Unión Europea, que violaron los acuerdos establecidos tras la debacle de la URSS y comenzaron a rodear a Rusia misma.
Bajo el régimen de Barak Obama y los auspicios de Hillary Clinton manejando la política exterior, Estados Unidos impulsó las «revoluciones de colores» contra los gobiernos pragmáticos del Medio Oriente y patrocinó alzamientos en las fronteras de Rusia con el fin de instalar gobiernos en los países vecinos que les permitieran el montaje de laboratorios de armas químicas, la colocación de misiles nucleares y la instalación de centrales de Interligencia, con el fin de mantener bajo acoso a la Rusia de Putin. Una Rusia no comunista. Una Rusia ‘conservadora’ que se afinca en la Iglesia Ortodoxa, que lucha contra la ideología de género y que combate la despoblación.
Estados Unidos, la Unión Europea y la OTAN mantuvieron las hostilidades contra Rusia desde territorio ucranio a partir del 2014…hasta que finalmente Putin se lanzó a las hostilidades abiertas. Logró instalar una mesa de negociaciones con Ucrania…pero el gpobierno de este país fue convencido por los dirigentes de las «democracias industrializadas» de retirarse, de no seguir negociando con Putin, y entonces principiaron las hostilidades abiertas.
Desde el principio, la maquinaria de propaganda occidental, conformada por los grandes medios de comunicación estadounidenses y británicos, comenzaron a bombardear:
1.- Que Rusia estaba siendo derrotada en el campo de batalla.
2.- Que Putin estaba enfermo.
3.- Que Putin tenía cáncer.
4.- Que Rusia no podía competir contra el «moderno» armamento estadounidense.
El objetivo no era unicamente derrotar a Rusia en Ucrania, sino colapsar a su economía, para con ello provocar la caída de Putin y colocar un régimen afín en ese país.
Para ello, se montaron sanciones económicas y financieras contra Rusia. Como resultado de lo anterior, lejos de doblegar a Putin y resquebrajar financieramente a Rusia, el principal daño ha sido para toda Europa, que por falta de suministros rusos y el impedimento de seguir exportando a dicho país, hoy ha visto crecer la inflación, el combustible se ha racionado y encarecido, plantas industriales se han vcerrtado, el desempleo crece…
Y en el campo de batalla, todas las estrategias puestas en práctica, no han logrado derrotar a Rusia.
Donald Trump había prometido terminar con la guerra en Ucrania «en 24 hopras».
Ahora, por el contrario, le suplica a Putin que no liquide a miles de soldados que combate con el uniforme ucraniano.
Estados Unidos padece una quiebra financiera. Sufre un fuerte déficit comercial y una volminosa deuda. Su situación es insostenible y por ello Trump amenaza, grita, insulta a países a los que más compra, para imponerles aranceles que le reditúen mayores ingresos monetarios.
Las medidas arancelarias, proteccionistas de Trump, pueden conducir a una severa recesión en Estados Unidos, ya que el encarecimiento final de los productos con componentes de importación, lesionará el ingreso real de los consumidores estadounidenses y ello impactará en la debilidad del mercado interno. Menjos ventas, menos producción, menos empleo.
Además, para bajar gastos, Trump ha ordenado el recorte de empleos en el sector píublico, MIles están quedando sin trabajo. Sin ingreso. Miles que votaron por él, con la esprernza mejorar.
Hoy, están en la calle.
La URSS, gigantesca pero ineficiente y corrupta, además de asesina, era estructuralmente débil. Hoy, la sola Rusia…se ha mostrado sólida y, económica y bélica, más potente que EU, los países de la Unión Europea y las fuerzas de la OTAN.
Hoy, la Rusia que ha logrado construir Putin es más poderosa que la gigantesca URSS.
Para los miembros de las generaciones formadas por la propaganda liberal estadounidense a través de la TV y las fantasías de Hollywood con personajes como Rin Tin Tin, la serie de televisión «Combate», las sagas cinemagtográficas de RAMBO, los «superhéoes» como Supermán, Batman, Robin, La Mujer Maravilla, el Hombre Araña y demás, lo siucedido a Estados Unidos en Vietnam, en Afganistán, en Ucrania, seguramente los ha de sacudir.
Pero sí, es cierto, Rambo no existe…
Por JOSÉ A. PÉREZ STUART.
VIERNES 14 DE MARZO DE 2025.
(*) Periodista –pionero tanto en el columnismo empresarial como en el análisis económico en la televisión y la radio mexicanas–, es Licenciado en Administración con estudios concluidos de Maestría en Derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México; Maestría en Historia del Pensamiento por la Universidad Panamericana y Maestría en Psicología, por la Universidad del Valle de México. Es Maestrando en Psicoterapia Psicoanalítica y Doctorando en Teoría Crítica.
Su más reciente libro, «PATOCRACIA: EL NUEVO ORDEN MUNDIAL.- Bipolaridad Social, Estado Posmoderno o «Nueva Era» (en clave masónico – marxista), fue publicado apenas en mayo de 2024 y en él analiza y exhibe las raíces de de los actuales conflictos en Ucrania, Medio Oriente, la Iglesia Católica, el invierno demográfico, la disputa por la orientación del Nuevo Orden Mundial, etc. Pérez Stuart realiza un análisis multidisciplinario donde se entrelazan la Historia, la Psiquiatría, el Derecho, la Filosofía, la Teología…
También es autor de «Del Padre Muerto al Asesinato del Padre: ¿el homosexualismo nace o se hace?«. A partir de una corriente psicoanalítica y la evidencia analítica con pacientes, en el libro Pérez Stuart explora y demuestra la relación entre la temprana fractura del sujeto en el ámbito familiar, con el nacimiento de su tendencia homosexual. Conflictos no resueltos que anidan en la ausencia de uno de los progenitores. Pero también presenta cómo ahora, de esa ausencia, de esa carencia, de esa «muerte» del padre en el seno de la familia…se ha pasado a un auténtico «asesinato» del padre por parte de los impulsores de la Revolución Sexual y la ideología de género.
(*) La derrota de Waterloo fue la batalla que tuvo lugar el 18 de junio de 1815, en la que Napoleón Bonaparte fue derrotado por la Séptima Coalición. Este acontecimiento marcó el fin del Imperio francés y el exilio de Napoleón a la isla de Santa Elena.
