“Después de consultar con las iglesias hermanas de la familia ortodoxa oriental, se decidió suspender el diálogo teológico con la Iglesia católica, reevaluar los resultados que el diálogo ha logrado desde su inicio hace veinte años y establecer nuevas reglas y mecanismos para la continuación del diálogo».
La Iglesia copta ortodoxa interrumpió así el jueves el intercambio teológico de sus especialistas con Roma, en lo que parece ser una nueva reacción a la declaración de la Fiducia Supplicans sobre las bendiciones para las parejas «irregulares», incluidos las homosexuales.
Hace una semana, el metropolita Hilarión, presidente de la Comisión Bíblico-Teológica del Patriarcado de Moscú, había definido el documento de la Doctrina de la Fe -ya rechazado con fuerza por los episcopados católicos africanos- como «una desviación muy grave de las normas morales cristianas«.
Ahora, este nuevo golpe al diálogo ecuménico proviene nada menos que de la sesión plenaria del Santo Sínodo de la Iglesia Copta Ortodoxa, presidida por el Papa Tawadros II, que se celebró el pasado 7 de marzo en el Centro Logos de la Residencia Papal en el Monasterio de Saint Anba Bishoy en Wadi Natroun, Egipto, y asistieron 110 de sus 133 miembros.
Es una bendición del pecado”
Junto a esta sensacional decisión, el Sínodo Copto expresó su “firme posición de rechazo a toda forma de relaciones homosexuales, porque violan la Santa Biblia y la ley con la que Dios creó al hombre y a la mujer, y considera cualquier bendición, de cualquier tipo, para Este tipo de relaciones son una bendición del pecado, y esto es inaceptable”.
Asimismo, la Iglesia Copta emitió un comunicado esbozando su posición sobre la homosexualidad, emitido luego del debate sinodal sobre el tema, afirmando que “Dios ha dado a la humanidad el libre albedrío para vivir según su divina voluntad y designio divino del matrimonio entre un hombre y un mujer.»
«Aquellos que sufren de atracción hacia el mismo sexo pero controlan este deseo son elogiados por sus esfuerzos y están sujetos a las mismas tentaciones que los individuos heterosexuales, como pensamientos, vistas y atracciones», se lee en el comunicado.
“Que se abstengan de comulgar”.
“Sin embargo”, continúa la declaración, “si alguien elige abrazar su tendencia homosexual y se niega a buscar ayuda espiritual y emocional, pero continúa quebrantando los mandamientos de Dios, entonces su situación se vuelve la misma que la de alguien que vive en adulterio. En tales casos, se les debe advertir y aconsejar que se abstengan de la comunión y busquen el arrepentimiento.
“En consecuencia, la Iglesia Copta Ortodoxa se opone firmemente a toda forma de actividad sexual fuera de los límites del matrimonio, que considera una distorsión sexual. Rechaza firmemente la idea de que se puedan utilizar diferentes contextos culturales para justificar las relaciones entre personas del mismo sexo bajo el pretexto de la libertad humana, ya que cree que esto es perjudicial para la humanidad. Si bien la Iglesia cree en los derechos humanos y las libertades, enfatiza que estas libertades no son absolutas y no deben usarse para violar las leyes del Creador.
Finalmente, el comunicado muestra su compromiso de «ayudar a las personas que tienen tendencias homosexuales» y subraya «que no las rechaza, sino que les brinda apoyo y asistencia para ayudarles a alcanzar una solución emocional y espiritual».
Por JOSÉ LORENZO.
Religión Digital.
