Ayer fueron nombrados nuevos ‘consultores’ del Dicasterio para la Doctrina de la Fe.
Planeamos hacer un análisis en profundidad de los nombres pronto, pero de un vistazo rápido cuatro nombres llaman inmediatamente la atención:
- Aristide Fumagalli fue objeto de un proceso por parte de la Congregación para la Doctrina de la Fe y notoriamente pro-gay ( AQUÍ , AQUÍ y AQUÍ ),
- Maurizio Chiodi tiene posiciones morales cuanto menos muy cuestionables y pro-LGTB y es uno de los que sustituyó a los «buenos» en el Pontificio Instituto Teológico “Juan Pablo II” para las Ciencias del Matrimonio y la Familia. Michael Haynes: « Chiodi argumentó que los actos homosexuales a veces pueden ser moralmente buenos y que incluso la anticoncepción artificial a veces puede ser algo bueno en el matrimonio «.
- Pier Davide Guenzi, otro teólogo pro-gay ( AQUÍ y AQUÍ ): « la situación existencial de las personas homosexuales no es un obstáculo insuperable en la vocación de amar «.
- Raffaele Talmelli, Superior General de los Siervos del Paráclito. La Orden en Estados Unidos gestionaba centros de «rehabilitación» para sacerdotes pedófilos. Ellos, más que cualquier congregación o diócesis estadounidense, fueron responsables del escándalo en Estados Unidos, porque fueron sus terapeutas quienes «trataron» a los pedófilos, dándoles el visto bueno para volver al ministerio. El centro más conocido fue Nuevo México. Muy famoso. Hay muchos casos civiles contra ellos.
¿Son éstos, entre otras cosas, los nuevos guardianes prosodomistas de la ortodoxia católica? Salvando la reverencia y un poco de broma, parecen las nominaciones al Arci Gay. Las opciones pro-homosexualidad, nos parece, son uno de los puntos clave (o EL punto clave y el arquitrabe) de este pontificado.
LUIGI CASALINI.
CIUDAD DEL VATICANO.
MARTES 24 DE SEPTIEMBRE DE 2024.
MIL.
