La copresidenta de German Synodal Way ha redoblado sus controvertidos comentarios a favor del aborto.
Durante la Cuarta Asamblea del Camino Sinodal, la laica Irme Stetter-Karp se dirigió a las críticas que suscitaron sus comentarios y dijo que debe ser posible “hablar sobre la cuestión de la provisión [del aborto]”.
Stetter-Karp había dicho en julio que “debe garantizarse una disposición nacional de la intervención médica del aborto”. Después de su controvertido comentario contra la vida, católicos laicos iniciaron una petición pidiendo su renuncia.
Durante un discurso en la Cuarta Asamblea Sinodal el 8 de septiembre de 2022, Stetter-Karp calificó las críticas a su declaración como una “campaña” en su contra. Afirmó que la organización laica “Maria 1.0” y el periódico católico alemán Die Tagespost lanzaron cartas en cadena a su dirección privada que la calificaban de asesina y pedían su excomunión.
El editor en jefe de Die Tagespost , Guido Horst, respondió a las acusaciones diciendo que el periódico “no había iniciado una campaña contra Stetter-Karp ni iniciado cartas en cadena”. Reconoció que Die Tagespost , sin embargo, comentó sobre las declaraciones a favor del aborto de Stetter-Karp desde una perspectiva católica y que ella “tendría que poder vivir con eso”.
Stetter-Karp continuó su discurso diciendo que está dispuesta a defender el párrafo 218 de la ley penal alemana (que regula el aborto en Alemania), calificando la legislación como un «compromiso ganado con esfuerzo». Refiriéndose directamente a sus comentarios anteriores sobre brindar acceso al aborto en todo el país, dijo: “ Sigo creyendo que es necesario esperar que los resultados de una consulta [de mujeres que buscan un aborto] sean abiertos, pero eso significa que también debe ser posible hablar sobre la cuestión de la provisión [del acceso al aborto], por muy sensible y delicada que sea”.
Con estas palabras, reafirmó su posición de que el acceso al aborto debe brindarse en toda Alemania.
La ley que Stetter-Karp dice querer defender, el párrafo 218 de la ley penal alemana, reconoce el derecho a la vida del nonato. Sin embargo, también permite el aborto en ciertos casos. Las mujeres embarazadas y los médicos tienen impunidad de castigo si la mujer exige el aborto por lo menos tres días después de tener consejo obligatorio, y si la concepción ocurrió no más de 12 semanas antes. Debido a esta regulación, alrededor de 100.000 bebés por nacer mueren por aborto en Alemania cada año.
Por ANDREAS WALZER.
FRANKFURT AM MAIN.
