Cesare Sacchetti, “El Gran Reseteo: el último paso hacia el Nuevo Orden Mundial”.

José Arturo Quarracino
José Arturo Quarracino

Cesare Sacchetti es un periodista italiano, que en su blog personal -La Cruna del Lago- publica noticias y opiniones censuradas por la “inquisición” de lo políticamente correcto y por la propaganda de las tendencias impuestas por los grandes medios, en forma de un “Ministerio de la Verdad” imaginado hace décadas por George Orwell.

Nació en Roma en 1983, se licenció en Estudios Europeos en la Universidad “La Sapienza”, asentada en la capital italiana.

Una semana antes de las elección presidencial en Estados Unidos publicó este análisis sobre lo que está en juego en la contienda electoral todavía no definida, no sólo sobre el futuro de Estados Unidos sino también del mundo entero. Una disputa en la que se juega en forma definitiva y absoluta el futuro de la humanidad.

Lo llaman el Gran Reseteo de la deuda mundial. Es el término que se ha utilizado con bastante frecuencia últimamente en los círculos que hablan del globalismo para describir el futuro próximo que las élites tienen en mente para toda la humanidad.

Recientemente ha aparecido un correo electrónico en el sitio web de Reddit sobre este mismo tema, en el que se informa todo lo que ha filtrado un político aparentemente miembro del Partido Liberal Canadiense, quien habla de un encuentro que tuvo lugar en el  partido mismo, durante el cual se anunciaron en esencia los planes diseñados en este sentido por el Nuevo Orden Mundial para Canadá y el resto del mundo.

Si se compara el contenido de esta carta con lo que ya está sucediendo, lo que el político canadiense informó parece tener cierta credibilidad. El topo anuncia básicamente que ya se han decidido cierres en las grandes ciudades de Canadá y de otros países del mundo, los que se aplicarán en el mes de noviembre. Esta revelación parece coincidir perfectamente con lo que ya están haciendoalgunos gobiernos europeos. De hecho, Alemania ha anunciado cierres parciales, en particular de gimnasios y bares, para el mes de noviembre. Francia, por el contrario, adoptará cierres más estrictos, similares a los de la primavera pasada, pero todo parece dar mucha credibilidad a lo que se escribió en el correo electrónico del anónimo político liberal de Canadá.

Al mismo tiempo, en esta fase de nuevos cierres, los gobiernos del mundo ya estarían preparando la construcción de centros de detención, donde los positivos también serían deportados, en contra de su voluntad.

Esta información concuerda perfectamente con lo que reveló oficialmente un diputado canadiense de Ontario, Randy Hillier, quien preguntó cómo el gobierno de Canadá ha aprobado un plan para construir estructuras en el país no muy diferentes a los modernos campos de concentración sanitarios.

En este punto llega el siguiente paso. El informante canadiense escribe que los casos de Covid aumentarán exponencialmente. La razón de este continuo aumento radica en el hecho de que los gobiernos hará una prueba completa con un hisopo que, como ya ha sido demostrado por numerosas pruebas científicas, produce hasta un 90% de falsos positivos.

El hisopo es entonces el instrumento para detectar una epidemia que en los hechos no existe. Es la prueba en sí misma la que crea casos que no existen y es por eso que los gobiernos continúan usándola obstinadamente. Si se dejan de usar los hisopos, la propagación artificial del virus muere instantáneamente. Sin embargo, este número creciente de casos servirá para llevar a cabo la segunda etapa de la Operación Covid: en  diciembre habrá cierres totales, mucho más estrictos y rigurosos que los del mes anterior.

 

La tercera fase de la operación coronavirus: el colapso de la economía mundial

El topo del Partido Liberal Canadiense escribe que en el 2021 las élites pasarán a la que puede definir como la tercera fase de la operación coronavirus, en la que se anunciará una mutación mucho más mortal y contagiosa que la del Covid-19, la Covid-21. En esta tercera fase, que tendrá lugar a lo largo de todo el trimestre del 2021, los ingresos hospitalarios aumentarán drásticamente y el sistema sanitario colapsará.

Habrá restricciones aún más estrictos para los desplazamientos entre países que en la primavera del 2020. Vendrán también más cierres y habrá una ola de quiebras sin precedentes. Los cierres de producción y el desempleo masivo conducirán a una probable hambruna.

Se producirán disturbios y revueltas en el mundo, y aquí, según el plan de la élite, los militares deberán entrar en acción. La ley marcial será la única forma de mantener en pie las dictaduras sanitarias que se perseguirán en todos los rincones del mundo.

En este punto, el sistema pondrá a las masas frente a la opción de ingreso universal básico. Básicamente desaparecerá el factor trabajo, tal como se lo conoce en la sociedad capitalista. Los cierres generales conducirán inevitablemente a un colapso de la economía mundial y darán paso a lo que será sin duda la crisis económica más grave de la historia de la humanidad.

Esta enorme depresión tiene una función precisa: desindustrializar completamente Europa y todo Occidente y crear una sociedad de dos clases, formada por una élite muy pequeña y una multitud de pobres, en la que la clase media desaparecerá definitivamente, así como las pequeñas y medianas empresas que seguirán la misma suerte.

Serán las grandes corporaciones las que tendrán la totalidad del mercado en sus manos. Este es exactamente el objetivo diseñado por el Club de Roma, uno de los grupos globalistas más influyentes, fundado y financiado por David Rockefeller, en una de sus publicaciones en el lejano 1972.

Con el trabajo fuera del camino, las masas no tendrán otra alternativa que aceptar las limosnas del gobierno para sobrevivir. En Italia el portavoz de este plan fue, no por casualidad, el Movimiento 5 Estrellas, criatura de las finanzas anglosajonas y del Estado profundo de Washington, que desde sus orígenes ha propuesto la aplicación de esta fórmula. El mismo fundador del Movimiento, Beppe Grillo, anunció que en el futuro no habrá lugar para el trabajo.

El ingreso básico no se dará de todos modos a todos. El plan prevé que los diferentes países del mundo acepten un plan de préstamos otorogado por el Fondo Monetario Internacional, el FMI.

El Presidente de Bielorrusia, Alelxandr Lukashenko, había denunciado precisamente los intentos del Fondo de corromper a su gobierno, ofreciéndole la enorme suma de 940 millones de dólares a cambio del cierre del país.

Esta vez el Fondo debería dar vida a un plan masivo de préstamos a varios países del mundo, lo que muy probablemente llevará a la expropiación y el control de todos los recursos estratégicos de las naciones en cuestión.

John Perkins, ex especulador a sueldo de las grandes corporaciones, ha explicado cómo el objetivo del FMI es precisamente ese: sumergir a los países en una deuda que no se podrán pagar, para después permitir que los grandes grupos privados tengan el control total de las economías nacionales.

Por consiguiente, la operación coronavirus servirá para dar lugar a una privatización mundial de los distintos países del mundo. Las grandes multinacionales tendrán el dominio absoluto. En este punto, una vez que los distintos países acepten la soga de los préstamos del FMI, y la UE o del MSE en el caso de Europa, se propondrá el “gran reseteo de las deudas privadas”.

Los gobiernos dirán a los ciudadanos que si quieren tener derecho a un ingreso básico y a la cancelación de todas sus deudas, desde préstamos hasta hipotecas, deberán renunciar prácticamente a todos los bienes personales.

En otras palabras, el globalismo quiere el fin de la propiedad privada.

Lo que proyecta el denunciante canadiense encuentra perfecta correspondencia con lo que ya previó el Foro de Davos, que ha dado vida a un programa llamado “el Gran Reseteo”, en el que se habla precisamente de un futuro próximo en el que las personas ya no tendrán bienes personales.

El mismo Bergoglio, ahora en el rol de falso profeta del Nuevo Orden Mundial, anunció claramente en su última encíclica Hermanos Todos que ya no habrá lugar para la propiedad privada en la sociedad abierta.

 

Aquellos que se nieguen a la vacuna serán detenidos en campos de concentración

Por lo tanto, según la información contenida en el correo electrónico, la “pandemia” no terminará antes de junio de 2021.

En ese momento se distribuirá la vacuna, muy probablemente aprobada por la Organización Mundial de la Salud y por la Fundación de Bill Gates, que será el único modo de volver a desplazarse libremente.

El político canadiense cuenta que en la reunión a puertas cerradas del partido varios miembros preguntaron qué sucederá si alguien no acepta participar en el reseteo de la deuda o de someterse a la vacuna.

La respuesta, que aparentemente llegó a través de las voces de los representantes de los clubes globalistas presentes en la reunión, fue inequívoca: “Los que se nieguen a participar serán considerados un riesgo para la seguridad pública y serán llevados a instalaciones de aislamiento”.

Por lo tanto, los que no acepten participar en el programa serán considerados una amenaza por las autoridades, y serán deportados indefinidamente por el régimen globalista a los campos de concentración, en los que su detención durará hasta que acepten recibir la vacuna o renunciar a la propiedad privada.

Es el asalto final del Nuevo Orden Mundial. El globalismo se está preparando para mostrar su verdadero rostro. Bajo la máscara del falso humanitarismo bueno se esconde la ferocidad sin precedentes del totalitarismo más peligroso de la historia.

También la revista Time dedicó su próxima portada al “Gran Reseteo” en el que se puede ver claramente cómo el reordenamiento de la sociedad mundial parte precisamente desde Europa e Italia.

En uno de los artículos que se refieren a este tema, Time anuncia claramente cómo la impronta asistencialista de los gobiernos será predominante en la nueva sociedad post-Covid.

 

Con Trump en la Casa Blanca el Nuevo Orden Mundial será inalcanzable

Pero en el artículo se pone como condición esencial para la realizacion de la sociedad globalista la victoria de Joe Biden en las próximas elecciones presidenciales.

El globalismo considera indispensable para el avance del Nuevo Orden Mundial la recomposición del histórico bloque euroatlántico. Se habla abiertamente de una “estabilización del euro” que conducirá a un “nuevo renacimiento europeo”, en una descripción de lo que se asemeja mucho a los futuros Estados Unidos de Europa.

Pero el superestado europeo no podrá nacerá sin la contribución indispensable de Estados Unidos.

Durante décadas, Estados Unidos ha sido el garante del proyecto de integración de la falsa Europa. Por lo tanto, el mundialismo no puede permitirse la victoria de Trump y no considera esta posibilidad en absoluto. Si Trump se queda en la Casa Blanca, la operación coronavirus anunciada por el infiltrado canadiense y confirmada por Davos y por el aparato mediático internacional, probablemente no podrá llegar a buen puerto. La contribución de la primera potencia económica y militar es simplemente esencial para dar vida al supergobierno mundial y a la sociedad diseñada por la globalización.

Por lo tanto, las élites están dando una fortísima aceleración a este plan. Parecen ser perfectamente conscientes de que Trump tiene muy grandes probabilidades de victoria y esta eventualidad evaporaría completamente sus planes. Harán de todo para deslegitimar una más que probable victoria de Trump.

 

Pero Trump ya está preparando su contraofensiva.

Las encuestas descaradamente manipuladas a favor de Biden serán el pretexto utilizado por los demócratas para acusar a Trump de amañar el voto. Los demócratas no reconocerán la victoria del presidente saliente. En este punto entrarán en acción las células terroristas financiadas por el establishment liberal estadounidense, Soros sobre todo, de Black Lives Matter y Antifa, con la misión de desencadenar desórdenes y violencias sin precedentes para arrastrar a Estados Unidos a una guerra civil.

Trump, sin embargo, ya está preparando su contraofensiva.

El último escándalo que involucra al hijo de su oponente demócrata, Hunter Biden, podría ser la punta de un iceberg que remite a una enorme red internacional de pedofilia en la que estarían involucrados personajes de primer nivel de Washington. En Twitter ya se están filmando imágenes de Hunter Biden realizando actos sexuales con menores de edad.

Rudy Giuliani, abogado y ex asesor de Trump, ha visto el contenido de la computadora portátil personal del hijo de Joe Biden. En ese ordenador, según Giuliani, hay imágenes y vídeos aún más impactantes. Según el ex alcalde de Nueva York, la computadora portátil contiene pruebas de abusos sexuales y tortura que involucrarían a Biden y a otras personas.

La historia de la computadora de Hunter Biden ha sido completamente censurada por los medios de comunicación italianos e internacionales.

El New York Post ya ha mostrado las pruebas de un enorme conflicto de intereses del padre de Hunter, en la época de su mandato en la Casa Blanca bajo la administración de Obama, con la sociedad comercial ucraniana, Burisma, para la que trabajaba el mismo Hunter.

En las últimas semanas también está saliendo a la luz también que Hunter Biden también está vinculado al Partido Comunista Chino, al igual que su padre.

Las mismas fuentes que publicaron los escabrosos videos de Hunter Biden han revelado cómo la familia Biden ha sido chantajeada y corrompida por la China comunista durante años. Se dice que China estaría en posesión de imágenes aún más comprometedoras, de las que se sirve desde hace tiempo para chantajear a los Bidens y a otros demócratas que han pasado por la Casa Blanca.

El propio régimen comunista habría corrompido a Joe Biden durante su mandato como vicepresidente a cambio de concesiones en el Mar del Sur de China, en el centro de amargas disputas entre China y la actual administración Trump.

Si Biden gana, China gana y controlará a Estados Unidos. El Nuevo Orden Mundial no tendrá más obstáculos.

Sin embargo, esta eventualidad necesitada de encuestas clamorosamente manipuladas, parece muy poco probable.Trump continúa bañándose en multitudes en sus mítines, mientras que Biden reúne a unas pocas docenas de personas.

Si gana, entonces Trump podrá acelerar para arrojar luz sobre las travesuras de la familia Biden, pero también hay otro gran escándalo al que el presidente quiere llegar: el spygate.

El presidente estadounidense ha sido claro con su fiscal general, Barr. Si Barr no envía a juicio a Obama, Biden y al establishment del Partido Demócrata, incluyendo a Hillary Clinton, por el  espionaje ilegal contra él, otro fiscal lo hará. Trump no tiene alternativa: tiene que golpear al sistema antes de que el sistema lo golpee a él.

El presidente también anunció en una reciente reunión que a partir del 4 de noviembre no se volverá a hablar más del Covid. Por lo tanto, Estados Unidos saldrá definitivamente de esta operación terrorista y se opondrá abiertamente al plan del globalismo.

En consecuencia, Trump comenzará con la contraofensiva definitiva contra el Nuevo Orden Mundial.

Después del mes de noviembre comenzará un durísimo enfrentamiento entre los altos niveles de la élite y de la masonería internacional y la presidencia de Trump, que también podrá contar con la ayuda de la Rusia de Putin.

Será el resultado de esta durísima batalla la que decidirá el destino de la humanidad y del mundo.

El globalismo está dispuesto a todo, pero su prisa desesperada podría ser sólo un indicio de que tal vez no lleguen a esta ronda.

Los días de este histórico otoño continúan transcurriendo velozmente y se aproxima inexorablemente el momento del enfrentamiento final entre las fuerzas de las tinieblas y las de la luz.

Comparte: