La tarde del 21 de abril, el secretario de Estado vaticano, cardenal Pietro Parolin llegó a México. La recepción se dio en el aeropuerto de la capital mexicana por representantes de la Secretaría de Relaciones Exteriores, de los encargados de la nunciatura apostólica, ahora vacante, y de la Conferencia del Episcopado Mexicano.Notoria, la ausencia del arzobispo Aguiar Retes.
La presencia del cardenal Parolin obedece a dos importantes momentos en la vida de la Iglesia católica de México. Una, la consagración episcopal de nuncio para Gabón y el Congo, Javier Herrera Corona, el sábado 23 de abril en Autlán, Jalisco y un acto conmemorativo en el marco del 30 aniversario de las relaciones México-Santa Sede (1992-2002).
En lo que se conoce de la agenda prevista, el viernes 22, Parolin tendrá actividades de trabajo en la nunciatura apostólica. Para el sábado 23, un desayuno con el arzobispo de Guadalajara, cardenal José Francisco Robles Ortega;posteriormente, tomará la ruta de poco más de 190 kilómetros que separan la capital tapatía de Autlán y presidirá la consagración de Javier Herrera Corona dándole la bula que lo designa como nuncio en los países africanos de Gabón y el Congo.
Parolin podría dejar el mismo sábado el Estado de Jalisco. El 24 de abril está programada la celebración de la misa del domingo de la Divina Misericordia en la catedral metropolitana de México.
El lunes 25 será el encuentro con los obispos de México; por la tarde, presidirá la misa en Basílica de Guadalupe previo a la apertura en la sede de la CEM del Encuentro Eclesial de México en donde será ofrecida una cena por el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo Maza.
El martes 26, el secretario de Estado desayunará con el presidente López Obrador en Palacio Nacional. Y aunque la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, anunció la inauguración oficial de la réplica de la Sixtina en Zócalo con “asistencia de los representantes de la nunciatura”, podría darse la presencia del cardenal previo al encuentro académico conmemorativo de los 30 años de relaciones y del reconocimiento jurídico de las iglesias Laicidad abierta y libertad religiosa, una visión contemporánea, en el antiguo Palacio de la Escuela de Medicina en dos momentos: Uno, el protocolario con las salutaciones oficiales y los mensajes del presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Rogelio Cabrera López y del arzobispo de México para seguir con las intervenciones del secretario de Estado vaticano y del canciller Marcelo Ebrard Casaubón.
Igualmente, una intervención del director de la facultad de medicina de la UNAM, Enrique Fajardo Dolci, para presentar una carta de intención al Códice Cruz-Badiano, documento de la medicina herbolaria azteca que fue devuelto a México en 1991, gracias a las gestiones que hace 30 años hizo el presidente Carlos Salinas de Gortari y el secretario de Salud, Jesús Kumate ante el Papa Juan Pablo II y que, según los especialistas, es un códice único en el mundo por su antigüedad al compilar el conocimiento prehispánico en torno a la medicina basada en hierbas, el documento salió a la luz en 1929 como parte de las colecciones de la Biblioteca vaticana.
El momento académico tendrá la lectura de las conferencias en torno a la laicidad y la libertad religiosa pronunciadas por el Pbro. Mario Ángel Flores Ramos, Raúl González Schmal, María Luisa Aspe Armella y Guillermo Hurtado Pérez.
Parolin regresará a Roma el martes 26 de abril.
Por: Guillermo Gazanini Espinoza
