Miguel Guixot, cardenal de la Curia romana, envió su mensaje anual de azúcar con motivo de Vesak, un festival budista que celebra el 21 de abril el nacimiento, la iluminación y la muerte de Buda, quien vivió hacia el año 500 a.C. en el norte de la India con el nombre de Siddhartha Gautama.
Guixot deseaba que los budistas “llegaran a comprender la naturaleza del duhkha [sufrimiento, dolor], las condiciones que lo causan y cómo se lo puede superar”. Probablemente no sepa que el sufrimiento y la muerte son causados por el pecado y vencidos por Cristo.
Esperando “nuevas formas de solidaridad configuradas por nuestras respectivas tradiciones religiosas” [excluyendo la verdad católica], y creyendo que los budistas ofrecen “curación” cuando encarnan la compasión por todos los seres tal como la enseñó Buda, equiparó la compasión budista con el amor divino de Cristo:
“Del mismo modo (¡sic!), para los cristianos, no hay remedio más eficaz que la práctica del ágape (amor desinteresado), el gran legado que Jesús dejó a sus seguidores”. Guixot se llama a sí mismo cardenal, pero llama a Jesucristo simplemente “Jesús”.
Y: “Del mismo modo (¡sic!), el énfasis de Buda en el entrenamiento del corazón es especialmente valioso a medida que avanzamos juntos en nuestros esfuerzos por llevar la curación”.
sábado 22 de abril de 2023.
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