“Expresamos nuestro más sentido pésame por la pérdida de numerosos miembros de la Policía Nacional. Queremos hacer extensivo este sentimiento a todos los familiares de los policías caídos en el cumplimiento de su deber”: así escribe la Presidencia de la Conferencia Episcopal Colombiana en una carta enviada al General Jorge Luis Vargas Valencia, Director General de la Policía Nacional de Colombia, con quienes los obispos se adhieren a las dos jornadas de oración anunciadas por el Ordinario Militar, para los días 28 y 30 de julio, con el fin de “rogar al Señor por la Policía Nacional y por un país en paz y reconciliado”.
“Queremos renovar nuestro agradecimiento por la entrega desinteresada de todos los miembros de la fuerza policial, quienes son presencia institucional en las diversas regiones y territorios de nuestra amada nación colombiana”, escriben nuevamente los obispos al General Vargas Valencia, reiterando su solicitud como Pastores para todos los miembros de las instituciones de la Policía Nacional.
Tras los últimos asesinatos de miembros de la Policía Nacional, el Ordinario Militar, Monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid, subrayó en un mensaje:
“Cada policía caído es un hermano, un hijo, un padre, un colombiano. , debemos clamar al cielo para que cese esta situación. ¡Nunca más el dolor de la Patria!”.
De hecho, explica, la muerte de cada uno de nuestros héroes siempre será acogida como el dolor de la Patria: así hemos experimentado los asesinatos cometidos en los últimos días contra nuestros policías Al exhortarnos a rezar por los policías fallecidos, el Ordinario Militar “nos invita a abandonar la indiferencia que nos hace mirar para otro lado”.
Según la información recogida por Fides, en las últimas semanas los miembros de la Policía Nacional han sido objeto de ataques y asesinatos por parte de la banda criminal de narcotraficantes denominada «el clan del Golfo«, como respuesta a la extradición a Estados Unidos de sus líder, Dairo Antonio Úsuga, alias «Otoniel». El saldo provisional habla de más de 30 policías muertos y al menos 25 ataques que causaron daños y heridos.
En esta ola de violencia también debe insertarse el asesinato del fiscal antidrogas paraguayo, Marcelo Daniel Pecci Albertini, ocurrido el 11 de mayo, mientras se encontraba de luna de miel en Barú, una isla turística de Colombia, y que fue alcanzado por sicarios. en la playa privada del hotel. Pecci era conocido por su participación en casos judiciales relacionados con organizaciones de lavado de dinero y narcotráfico. En Paraguay ocupó el cargo de Fiscal contra la delincuencia organizada, el narcotráfico, el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo.
BOGOTA, Colombia.
Fides.
Jueves 28 de julio de 2022.
