* Por culpa de ‘Bimbo’: un centenar de hogares de jóvenes y muchas mujeres se quedan «sin alternativas» de trabajo
* Y otras empresas auxiliares también pierden la actividad del mantenimiento
El cerrojazo que echa Bimbo en la provincia de Alicante para llevarse la producción a Barcelona sacude la economía de dos municipios principalmente -El Verger y Denia- donde hay un centenar largo de hogares en vilo porque no ven futuro sin estos salarios.
«Es un palo para los trabajadores, la poca industria que hay se va… la comarca está muy preocupada, es un drama», retrata el presidente del comité de empresa, José González.
A diferencia de otros cierres industriales en los que el personal afectado es mayor y se puede encontrar una vía para las prejubilaciones pactadas, en este caso no resulta viable por la edad.
Somos más de cien familias que nos quedamos en una situación dramática, gente joven, porque esta plantilla no es mayor, a la mayoría ni se le pueda dar una salida, todas las alternativas son malas», lamenta el representante de los trabajadores.
Con el detalle añadido de que predominan las mujeres, que según las estadísticas suelen tener más problemas de reinserción laboral en el mercado. Y en algunos casos, los dos miembros de la pareja se irían al paro, mucho con hipotecas porque compraron vivienda hace pocos años, tal como puso de relieve María José Gómez, de Comisiones Obreras.
De puertas afuera, el cese de la actividad de Bimbo hará resentirse también la economía local en la zona más próxima. Hay puestos de trabajo indirectos, porque «el servicio de limpieza y de portería está externalizado», una decena más de empleos que se pierden.
Y además, está el mantenimiento de las instalaciones de producción en la fábrica, con «muchos servicios auxiliares que también venían habitualmente, como empresas de cerrajería, de carpintería metálica, fontanería, albañilería… se pintaba con frecuencia también: a la comarca le da un palo importante también», detalla González.
Con este panorama, los representantes de la plantilla afrontan con preocupación la próxima reunión con los directivos de Bimbo,. De entrada, se les ofrece la indemnización mínima por despido -20 días por año trabajado- o el traslado a Madrid u otras plantas de la multinacional mexicana en España.
Por JOSÉ LUIS FERNÁNDEZ.
