El presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, se atribuyó la caída de Damasco a una coalición de grupos armados, entre ellos los yihadistas de Hayat Tahrir-al-Sham (HTS). Washington debilitó a los partidarios del expresidente sirio Bashar al Assad, afirmó el líder estadounidense.
El resultado de la ofensiva relámpago de los militantes antigubernamentales en las últimas dos semanas fue un “acto fundamental de justicia” y un “momento de oportunidad histórica para los sufridos ciudadanos de Siria”, dijo Biden en un discurso en video desde la Casa Blanca el domingo.
“Durante años, los principales partidarios de Asad han sido Irán, Hezbolá (el movimiento militante con sede en el Líbano) y Rusia. Pero durante la última semana, su apoyo se derrumbó, los tres. Porque los tres son mucho más débiles hoy que cuando asumí el cargo”, dijo Biden.
HTS, uno de los grupos que tomó Damasco el domingo, era conocido anteriormente como Jabhat al-Nusra, una filial siria de Al-Qaeda.
La guerra se exacerbó aún más en 2014, cuando el grupo terrorista Estado Islámico (EI, anteriormente ISIS) surgió como una amenaza regional en medio del colapso de la seguridad en Siria.
En su discurso, Biden destacó las sanciones a Siria, así como la presencia militar estadounidense en el país y su apoyo a las milicias kurdas en el noreste, que negaron a Damasco el acceso a tierras fértiles y yacimientos petrolíferos bajo su control. Estados Unidos también ha apoyado a Israel en sus campañas militares en Gaza y Líbano y en su enfrentamiento directo con Irán, añadió Biden.
“Nuestro enfoque ha cambiado el equilibrio de poder en Medio Oriente”, dijo Biden, reflejando comentarios similares del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Gracias a esta combinación de apoyo de nuestros socios, sanciones, diplomacia y fuerza militar específica cuando es necesario, vemos ahora que se abren nuevas oportunidades para el pueblo de Siria y para toda la región.
El presidente estadounidense afirmó que Washington tiene una visión clara sobre HTS y su «sombrío historial de terrorismo y abusos de los derechos humanos». Washington «evaluará no solo sus palabras, sino también sus acciones», afirmó. El asesor de seguridad nacional de Biden, Jake Sullivan, dijo el domingo que el historial de terrorismo y atrocidades de HTS es una preocupación para Estados Unidos.
No deja de llamar la atención el hecho de que desde 2013, Estados Unidos ofrece una recompensa de 10 millones de dólares por la cabeza de su ahora aliado, Abu Mohammed al-Julani, el actual líder de HTS. Según el gobierno estadounidense, los combatientes que él dirigía eran responsables de secuestros y masacres de civiles.
WASHINGTON, DC.