Caritas Internationalis, en una declaración publicada el 26 de febrero en Caritas.org y firmada por su Secretario General, Alistair Dutton, deplora «la oleada de drásticos recortes en la ayuda internacional al desarrollo».
Se refiere a la decisión del Reino Unido de recortar su «presupuesto de ayuda» en un 40% y la califica de «cruel indiferencia».
Más polémica: «Esto matará a millones y traicionará a cientos de millones más que sufrirán enormemente por ello».
Y: «Además de la congelación de toda la ayuda estadounidense, Francia, los Países Bajos, Suiza, Alemania y el Reino Unido también han recortado su ayuda internacional en 2.000, 2.400, 133, 1.900 y 6.000 millones de dólares respectivamente, arrancando otros 12.500 millones de dólares a los mil millones de personas más pobres del mundo.»
Cáritas es una federación de 162 agencias de ayuda «católica» que trabajan en más de 200 países y territorios de todo el mundo.
Entre líneas, la declaración significa que la «caridad» de la Iglesia está comprada por los regímenes occidentales.