La Iglesia Católica reaccionó ante la sentencia emitida en contra del sacerdote acusado de abuso sexual y reiteró su postura de tolerancia cero en casos comprobados de abuso sexual.
Asimismo se resaltó que se mantendrá la aplicación de protocolos firmes y claros que permiten ejercer el Ministerio a ejemplo del buen pastor y al mismo tiempo salvaguardar la integridad de todos, especialmente de los más débiles.
Tras darse a conocer la sentencia resolutoria emitida por el Juzgado de Oralidad del Primer Partido Judicial con sede en Aguascalientes en contra del sacerdote, Flavio Ibarra Pedroza, se resaltó que ha sido un proceso judicial penal extenso que ha causado conmoción en todos, pero ha infligido un particular sufrimiento en los involucrados directamente y especialmente en sus familias.
A través del comunicado, el Obispado manifestó su confianza en que las decisiones emanadas por las instituciones dedicadas a la impartición de justicia son tomadas con estricto apego a Derecho.
Asimismo reconoció que el proceso se siguió en apego a todos los cauces legales y pertinentes para el esclarecimiento de cada caso.
“Como Iglesia no podemos ignorar nuestro compromiso de velar que cualquier espacio cristiano sea un hogar en el que todos podamos vivir en libertad, armonía y seguridad en las expresiones pastorales de nuestra fe”,
refiere la postura.
También se resaltó que el Mandamiento Supremo del amor exige a todos quienes se reconocen cristianos, realizar todas las acciones posibles de vivir la fraternidad y a rechazar toda forma de violencia a cualquier persona.
Por lo tanto los pastores tienen el deber de asumir el compromiso de dar un testimonio auténtico del Evangelio que entre otras cosas exige hacer propio el dolor de todos los que sufren y de acompañarlos compasivamente.
Finalmente el Obispado reiteró su postura de tolerancia cero contra cualquier caso de abuso sexual y violencia.
Con información de HidroCalidoDigital/Redacción
