La diócesis de Rottenburg-Stuttgart, Alemania, ha contratado a un ex sacerdote caído en desgracia y violador del celibato como asistente pastoral en una parroquia.
Karl-Martin Steinhauser, de 57 años, fue ordenado sacerdote en 2003 a la edad de 36 años. Trabajó cuatro años como vicario y tres como párroco.
Entonces conoció a Mirette, una mujer copta ortodoxa de Egipto. «Simplemente me enamoré de ella», declaró a Katholisch.de (31 de marzo).
Al mismo tiempo, le seguía gustando el sacerdocio. Una vez, se echó a llorar [sic] durante una eucaristía porque se dio cuenta de que nunca volvería a consagrar las hostias.
Steinhauser rompió su voto de celibato, dejó el sacerdocio en 2010 y fue laicizado dos años después. Se casó con Mirette en la misma parroquia, donde ahora trabaja como asistente pastoral. También se convirtió en padre de un hijo, que ahora tiene 10 años.
En cuanto a su salario, estaba empleado por la diócesis como profesor de religión. Tras 13 años de enseñanza, quiso volver al ministerio pastoral.
En otoño de 2024, la diócesis de Rottenburg-Stuttgart contrató al sacerdote laicizado como «asistente pastoral». Ahora viste un alba blanca sin estola y permanece de pie cerca del altar durante los servicios litúrgicos. Algunos le llaman reverendo.
La página web de los obispos alemanes Katholisch.de sólo tiene elogios para la traición del sacerdote caído, que no muestra ningún remordimiento.
La diócesis de Rottenburg-Stuttgart está dirigida por el obispo Klaus Krämer desde diciembre de 2024.
ROTTENBURG, ALEMANIA.
LUNES 31 DE MARZO DE 2025.
ESNEWS.
