Tras los resultados electorales que marcan una tendencia en favorecer la candidatura del oficialismo, los obispos de México lanzan un mensaje después de la jornada electoral por el que dirigen su felicitación al pueblo de México, a la virtual presidente electa a la vez que expresan su satisfacción por la jornada electoral del dos de junio en la que votó poco mas de 60 millones de electores de un total esperado de 98 millones aproximadamente.
En el documento, esta ocasión mostrando las firmas autógrafas del arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López y el obispo de Cuernavaca, Ramón Castro Castro, los prelados se sintieron “satisfechos” por la participación ciudadana, dirigiendo su felicitación al pueblo por “ejercer sus derechos civiles y políticos”. Para los obispos, los electores salieron a “votar copiosamente, para fortalecer la democracia y elegir, por mayoría de votos, a quienes ocuparán los miles de cargos públicos que estaban en contienda”.
A Claudia Sheinbaum, quien al momento tendría más de 33 millones de votos frente a su más cercana competidora quien acumula más de 15 millones y medio de votos, externaron la felicitación remarcando “el privilegio de ser la primera mujer en llegar a la más alta magistratura del país” asegurando oraciones para que con “responsabilidad y sabiduría”. Confiando en que en la próxima administración se privilegie el diálogo, los obispos llaman al inicio de la reconciliación nacional para que Sheinbaum “pueda conducir a México hacia mejores horizontes donde la República se fortalezca, el estado de derecho se viva plenamente, la democracia permita la transición política sin violencia, el desarrollo y la justicia de toda la nación”, expresan en su mensaje.
Los obispos destacan igualmente que la jornada del dos de junio fue un testimonio admirable de participación y madurez democrática. “Como pastores, nos llena de esperanza ver cómo los ciudadanos abrazan los valores del bien común”.
Resaltando siempre el bien común, el Episcopado mexicano llama a todos los ganadores a asumir sus responsabilidades para gobernar a favor de todos los mexicanos independientemente de la preferencia electoral. Asimismo, señalan que la Iglesia católica siempre tendrá el compromiso “de seguir colaborando, junto a todos los hombres y mujeres de buena voluntad, en la apasionante tarea de construir la paz y buscar el desarrollo integral de nuestra sociedad” a la vez que imploran la protección de la Virgen de Guadalupe siempre ha caminado con nosotros mostrándonos los caminos de Jesucristo y el Evangelio para que seamos artesanos de paz, nos conceda la sabiduría, la serenidad y la fortaleza para aceptar los resultados de esta fiesta cívica” y reconocernos como hermanos, hijos de un mismo Padre.