* Celebró el domingo una misa en la Basílica de Letrán.
Francisco ha retomado una tradición papal anterior para la solemnidad católica del Corpus Christi.
Por primera vez en años, acudió el domingo por la tarde a la basílica de Letrán, en el centro de Roma, para asistir a una misa. El Vaticano también había anunciado su participación en la posterior procesión hacia la Basílica de Santa María la Mayor. Sin embargo, el hombre de 87 años se saltó la cita y esperó a los participantes en la explanada y allí dio la bendición.
El Papa, obispo de Roma, pidió en su catedral romana un compromiso con la paz y la buena convivencia social. El mundo necesita gratitud, libertad y cercanía para superar lo que han provocado la guerra, el egoísmo y la indiferencia.
Sólo con el amor es posible «seguir esperando y reconstruir incansablemente lo que el odio destruye», afirmó en su sermón.
Desde que Juan Pablo II asumió el cargo en 1978, el servicio del Corpus Christi se celebra en la Basílica de Letrán, seguido de la procesión hacia María Mayor.
En 2018 y 2019, Francisco rompió con la tradición y celebró en los suburbios romanos. Posteriormente, primero la pandemia del coronavirus y luego los problemas de salud del Papa impidieron su participación en la tradicional celebración.
La fecha oficial de la Solemnidad del Cuerpo y Sangre de Cristo, como se llama oficialmente al Corpus Christi, es el segundo jueves después de Pentecostés.
En muchos lugares, incluida Roma, la fiesta se celebra el domingo siguiente. La fiesta, que se originó en la Edad Media, recuerda y celebra la presencia de Cristo resucitado en los dones del pan y el vino en la Eucaristía.
CIUDAD DEL VATICANO.
LUNES 3 DE JUNO DE 2024.
KATH.
