* «Tan pronto como mi familia y yo comenzamos el proceso de conversión, nos inundaron sucesos extraños en nuestro hogar, pero una bendición en la casa y la entronización del Sagrado Corazón nos trajo la paz de Jesucristo.»
Jayme Clune, de Atlanta, Georgia, testificó en NcRegister el 6 de mayo sobre «extraños sucesos» en su casa cuando su familia comenzó el proceso de conversión al catolicismo.
Ella y su marido recibieron el bautismo, la confirmación y la Sagrada Comunión en la Vigilia Pascual de este año. Antes de su conversión, la familia asistía a un grupo religioso no confesional con grandes pantallas de vídeo, música floja y un predicador que les hacía sentir bien. Tienen dos hijos pequeños.
Jayme Clune estudió la historia de la Iglesia primitiva y descubrió que sus creencias coincidían con las de la Iglesia católica. Tanto ella como su marido se sintieron atraídos por la tradición, la liturgia y los sacramentos de la Iglesia.
Cuando comenzaron el proceso oficial de conversión, se encontraron con extraños sucesos en su casa.
– Se encendían luces en habitaciones en las que no había estado nadie.
– Una gran ventana arqueada se rompió inexplicablemente, lanzando miles de fragmentos de cristal por el suelo.
– El agua goteaba del fregadero de la cocina.
– Los inodoros se desbordaron.
– La fosa séptica se desbordó.
– La lavadora goteaba agua pero el técnico no encontró nada malo en ella. Fue necesario sustituir la lavadora.
– El frigorífico dejó de enfriar misteriosamente y fue sustituido.
– El aire acondicionado se rompió y fue sustituido. El termostato del nuevo aire acondicionado no funcionaba correctamente y el técnico no encontró ninguna explicación.
– Goteaba agua del marco de madera de una puerta.
– La pantalla del televisor cambió de color -o dejó de funcionar del todo- durante la Eucaristía diaria retransmitida por streaming.
Estos sucesos continuaron durante meses, agotando la economía familiar e influyendo en el clima de la familia.
Cuando se rompió el segundo aire acondicionado, el marido de Jayme se preguntó si debían detener la conversión a la Iglesia antes que sufrir más daños en el hogar y en las finanzas.
Jayme le pidió que aguantara, buscó textos de oración y encontró el Rosario en inglés y latín y algunas novenas.
La familia instaló una pila de agua bendita y un sacerdote bendijo la casa, dejando una imagen del Sagrado Corazón de Cristo con la inscripción: «Aquí está entronizado».
DOMINGO 12 DE MAYO DE 2024.
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