* Mujer estadounidense de 20 años quedó embarazada después de haber sido violada y ahora se enfrenta al lobby abortista.
“El aborto no es la única opción”, dice Ayala Isenberg.
“No dejes que nadie te diga eso. Ni de tu novio, ni de tu madre, ni de la persona que abusó de ti, ni de nadie, porque al final es tu elección. Puedes quedarte con el bebé”.
La estadounidense de 20 años sabe de lo que habla. Quedó embarazada a los 15 años después de años de abuso. En una entrevista con Students for Life en el podcast Let’s Talk About Life, Ayala compartió cómo se convirtió en una defensora provida.
Le parece “extralimitado” que mujeres como ella sean utilizadas políticamente en situaciones de emergencia para hacer avanzar la narrativa proaborto, por un lado, y mantener la industria del aborto en funcionamiento, por el otro.
Ella misma se negó a abortar a los 15 años cuando supo que había organizaciones que querían ayudarla. Ella entendió que su hijo por nacer era un ser vivo, un pensamiento que fue ignorado política y socialmente.
Aunque su hija fue el resultado de una violación, todavía sentía que su bebé “merecía vivir”, admite la joven de 20 años, que a menudo se enfrenta a reacciones negativas ante su decisión.
Las mujeres sufren porque sus opciones están enormemente restringidas por la narrativa pro-aborto, se queja. Pocas veces se escuchan historias como la suya, que terminan bien, donde un niño nace y se cría enamorado.
Ella confronta al lobby abortista con el hecho de que el aborto no ayuda a las víctimas de violación; por el contrario, añade un trauma adicional que pesa mucho sobre las mujeres.
“Un aborto no tiene absolutamente nada que ver con curar una violación”, afirma.
Alienta a las mujeres a tomar medidas contra los perpetradores pero a quedarse con el bebé porque: “Las consecuencias de perder al bebé duran toda la vida”.
kath/lifesitenews.
