Fernanda Serrano / ACN.- Este 4 de diciembre, en conferencia de medios efectuada en el Centro Nacional de Comunicación Social (Cencos), Joana Cruz Galván, víctima de abusos, hizo público su testimonio en contra de cuatro sacerdotes y un acólito de la diócesis de Atlacomulco, Estado de México. En la conferencia de medios, impulsada por la organización Spes Viva, Joana narró su dramática experiencia.
Cuenta que, a los 12 años, ella acompañaba a su mamá al Seminario Mayor de Atlacomulco donde conoció a César Israel Dávila Alquisiras, Luis Alberto Vázquez Mendoza, Francisco González Hernández y el acólito Gustavo Ramírez Jiménez, quienes abusaron de ella cuando era una niña. Se desconoce el paradero de estos últimos mientras que Doroteo Ildefonso Santos, en ese tiempo rector del Seminario, fue el único detenido acusado de violación; sin embargo, a pesar de haber sido procesado, ha recuperado su libertad. Joana busca justicia, “como lo dije en una audiencia al juez, no habla esta chica de 20 años, habla la niña de 12 años a la que violaron, a la que abusaron sexualmente”.
“Desde chica, me enseñaban a ver a los sacerdotes como sagrados y les debíamos un respeto. Por esta misma razón yo no podía decir que no, lo sentía como una responsabilidad”, señaló Joana Cruz, explicando cómo tuvo que normalizar esa conducta y aprender a vivir con ella. Lamentablemente, no fue el único problema que tuvo, también enfrentó la revictimización como cuando, al momento de recibir terapia psicológica que vino como forma de apoyo de la iglesia, sufrió de humillación y maltrato de la psicoanalista Viviana de la Fuente, quien minimizaba su proceso y la culpaba por lo sucedido.
Entre los participantes en la conferencia de medios, Alberto Manuel Athie Gallo, activista y asesor de Derechos Humanos, refirió sinnúmero de casos de abuso sexual y fomentando el tomar acción a favor de las víctimas, aclarando que la sexualidad es un problema generalizado, no solo de las iglesias. Desgraciadamente, afirma, la iglesia no atiende la problemática. “Hace falta una estrategia mediática, no basta con ver a los niños y niñas como moneda de cambio, el cambio está en el poder”, finalizó el activista.
La activista social y periodista Ana Lucía Salazar Garza habló sobre los derechos de la niñez. Quien también fue víctima de abuso dentro de los Legionarios de Cristo, señaló que no hay partido político que se interese por los niños violados por la iglesia. “Los delitos son calificados por organismos internacionales como delitos de lesa humanidad y tortura, donde la pederastia clerical está dentro del espectro de la violencia sexual infantil”, explica la periodista que expone los casos que han existido en México y en el mundo.
Su testimonio se ha convertido en una lucha social, ya que también pudo compartir su desafortunada experiencia, dando a entender que ninguna víctima es más ni menos, sino que tienen un contexto y una historia diferente. La pederastia clerical es también un delito cometido por el Estado, ya que propicia un encubrimiento institucional de los sacerdotes e incluso de monjas pederastas. “Cuando tú eres una víctima de pederastia clerical eres inmediatamente invisibilizado, te enseñan la responsabilidad de perdonar a tu agresor sexual. Es un tema religioso que te violan con Dios, te violan diciéndote que Dios te está viendo y que no estás haciendo nada malo”, explicó la periodista.
De igual manera, Jesús Barba Martín, ex-académico del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), expuso la idea errónea acerca del celibato obligatorio a través de cuestiones históricas, en donde hubo una “predicción” certera sobre las consecuencias de obligar a los sacerdotes a esta condición, “San Pablo no obliga ni en ningún lugar dice concretamente que los obispos que no pueden estar en matrimonio”, explicó el ex-académico, mencionando que se trata meramente de voluntad para dedicar su vida y sus recursos a algo que aman.
Cristina Sada Salinas, presidenta de Spes Viva e impulsora de la conferencia de medios, compartió que aún hay muchos casos en la República Mexicana que buscan el apoyo, ya que es impresionante que no exista Estado sin denuncias. No todos han podido alzar la voz en contra de su abusador y afirma que los abusos en la parte de la Iglesia católica van a la par del adoctrinamiento, ya que los niños son educados “santificando a los sacerdotes”. “Ojalá se vuelva un escándalo en los medios y algo muy incómodo para la iglesia de Atlacomulco”, refirió la presidenta Cristina Sada, quien agradeció a Joana Cruz por compartir su dolorosa experiencia esperando ayudar para la obtención de la justicia y reparación del daño.
