“Nuestras Iglesias están unidas para condenar esta terrible y devastadora masacre, y la consideramos un crimen contra la humanidad. Pedimos a todas las partes que pongan fin a esta guerra”, afirmó .
«Como Iglesias, hasta ahora hemos emitido dos declaraciones pidiendo el fin de la violencia en Tierra Santa y que personas de buena voluntad intervengan para detener lo que está sucediendo en esta tierra», añadió Naoum, reiterando la intención de «mantener nuestras iglesias y centros eclesiásticos». instituciones, no sólo las iglesias anglicanas, sino todas las iglesias. Así como el hospital seguirá abierto para llevar a cabo nuestra misión médica y nuestra misión pastoral”.
En la conferencia también estuvo presente el Patriarca Latino de Jerusalén, card. Pierbattista Pizzaballa, el custodio de Tierra Santa, Francesco Patton y el rector de la Iglesia Evangélica del Redentor en Jerusalén, Joachim Lenz. Naoum habló de un «crimen» cometido en el hospital, donde unas horas antes la gente «rezaba por la paz y los niños jugaban» en el patio.
Según el arzobispo anglicano, la administración del hospital había recibido un total de tres advertencias israelíes para evacuar el hospital el sábado, domingo y lunes.
La advertencia se transmitió al personal y a quienes se habían refugiado en el hospital.
Respecto a la responsabilidad del hecho, Naoum no entró en detalles porque, explicó, “las Iglesias no somos expertos militares ni periodistas que analizamos los hechos. Como Iglesias estamos unidos contra cualquier forma de violencia contra los civiles, venga de donde venga».
Por último, el arzobispo anglicano invitó a «los líderes mundiales a defender la justicia y la paz, a comprometerse a poner fin al conflicto y a una solución conforme al derecho internacional».
Un llamamiento similar lanzó hoy también la Media Luna Roja Palestina (PRC), que se queja de que «el silencio de la comunidad internacional no hace más que alentar tales acciones y aumentar el riesgo para las vidas de civiles inocentes».
La MLRP también recordó que las evacuaciones ordenadas por Israel a Gaza no son factibles y representan una sentencia de muerte para los pacientes. Según el servicio de salvamento, las instalaciones y el personal sanitario, así como la población civil, deben ser protegidos de conformidad con el derecho internacional humanitario.»
Por DANIELE ROCCHI.
SIR.