Una política centroeuropea está impulsando una agenda profamilia para luchar contra el problema mundial de la disminución de la población, una batalla que, según ella, es más seria que el cambio climático.
La presidenta húngara, Katalin Novák, ha estado llevando su mensaje al escenario mundial en sus esfuerzos por luchar contra el colapso demográfico. En una entrevista reciente con TV Tokyo, promocionó el amplio sistema de apoyo familiar de su gobierno que alivia las tensiones financieras de las parejas que desean tener hijos.
Novák dijo a la cadena japonesa, cuyo propio país se enfrenta a la mayor caída de población desde 1968: «No debería haber ningún obstáculo financiero para la maternidad [o] la crianza de los hijos». También dio a conocer el sistema húngaro de exenciones fiscales e incentivos financieros para las familias que deseen criar hijos.
La exsecretaria de Familia y madre de tres hijos añadió:
No debería haber ningún obstáculo financiero en la maternidad y la crianza de los hijos, por lo que cuando los jóvenes decidan tener hijos y de manera responsable, entonces deberíamos permitirles que lo hagan. El principio en sí es no tener cargas adicionales y desventajas financieras porque una pareja decide tener hijos frente a aquellos que deciden no tenerlos.
El 19 de septiembre, en Nueva York, el presidente húngaro expresó la urgencia de tales medidas. Al dirigirse a los líderes mundiales en la inauguración de la 78ª Asamblea General de la ONU, planteó la cuestión del colapso demográfico debido a las bajas tasas de natalidad. «En Europa y en algunos de sus países, el invierno demográfico se ha convertido en una edad de hielo», afirmó. «Si no se aborda esta cuestión, tendrá un impacto inconmensurable en nuestras economías, sociedades y seguridad en el futuro cercano».
Ella añadió,
Si no hay hijos, no hay futuro. ¿De qué sirve cuidar la Tierra si no tenemos hijos y nietos a quienes heredársela? Si la falta de hijos se generaliza, si nacen menos niños que los que fallecen en nuestros países, nuestro amado mundo, que creemos seguro, quedará destrozado.
El presidente húngaro elogió al director ejecutivo de X, Elon Musk, padre de 11 hijos, por también hacer sonar la alarma sobre la amenaza de una disminución de la población.
«Elon Musk puede tener razón cuando dice que el declive demográfico es un problema más grave que la crisis climática», afirmó. «Se presta poca atención al cambio real e irreversible del mundo.»
De hecho, en agosto, el multimillonario publicó una foto suya en X sosteniendo un cartel que decía: «La crisis demográfica es real«. Encima de la imagen había una publicación que decía: «El colapso demográfico es la mayor amenaza para la civilización«.
Las políticas familiares económicamente favorables de Hungría (aproximadamente del mismo tamaño que el estado de Indiana) han dado sus frutos . La tasa de fertilidad de Hungría se situó en 1,61 nacidos vivos por mujer en 2021, por encima del promedio de la UE de 1,53, y continúa luchando por ascender desde el mínimo histórico del país de 1,23 en 2011, una era aún atormentada por décadas de control comunista soviético.
La tasa de matrimonios en Hungría también ha aumentado, duplicándose de 3,6 matrimonios por cada 1.000 personas en 2011 a 7,4 en 2021, muy por encima del promedio de la UE de 3,9 para ese mismo año. La constitución de Hungría protege la institución del matrimonio «como la unión de un hombre y una mujer».
Los esfuerzos de Hungría por cambiar el rumbo de la disminución de la población no están exentos de críticas. Algunos dicen que las políticas presionan a las mujeres para tener hijos, otros afirman que discriminan a las parejas de bajos ingresos y otros denuncian que las parejas del mismo sexo estén excluidas de los beneficios.
Entrevista de TV Tokio con Katalin Novák
Los defensores de la vida también critican el programa gubernamental que sienta precedentes. El presidente de Vida Internacional de Hungría , Imre Téglásy, sostiene que las políticas gubernamentales por sí solas no pueden superar esta cultura de la muerte. Le dijo a Church Militant que «los medios financieros por sí solos no son suficientes para mejorar el número de nacimientos en ningún país. También se necesita una promoción más amplia de la mentalidad provida, de toda la cultura de la vida, con las iglesias desempeñando un papel clave».
«Pero aquellos que quieran salvar a sus naciones del desastre demográfico aún deben ir un paso más allá de superar el fetiche feminista-capitalista del empleo femenino», afirmó Téglásy. «El tema más importante es el del aborto».
por Martina Moyski.
BUDAPEST, Hungría.
ChurchMilitant.
