* Las prisioneras se sienten en peligro al tener que compartir instalaciones con hombres biológicos.
Una supuesta “mujer transgénero” condenada por obligar a su hija de siete años a participar en la pornografía ahora se encuentra en una prisión para mujeres a pesar de ser hombre y, según los informes, conservar los genitales masculinos, y aparentemente quiere casarse con su también- cómplice trans y comparte celda con él.
El año pasado, LifeSiteNews cubrió la historia de Matthew «Marina» Volz, quien junto con Adam «Ashley» Romero y un tercer cómplice operaban un «estudio de producción de pornografía transgénero especializado en contenido fetichista amateur, BDSM y tabú» desde su hogar. Se declaró culpable de una variedad de cargos, que incluyen agresión sexual, poner en peligro a niños y trata de personas, por lo que fue sentenciado a 25 años de cárcel, pero el detalle más llamativo del caso fue que agredió sexualmente a la hija biológica de Volz, que tenía siete años en ese momento, y lo filmó.
Ahora, el New York Post informó que Volz y Romero están cumpliendo sus sentencias en el Centro Correccional para Mujeres Edna Mahan de Nueva Jersey, y Volz figura como «mujer» en los registros penitenciarios. Al menos 10 reclusas «trans» se encuentran actualmente en Edna Mahan, la única prisión para mujeres del estado, que tiene un historial de «fallar en proteger a las reclusas de daños debido al abuso sexual por parte del personal», según un informe de 2020 . Informe del Departamento de Justicia de Trump.
El Departamento Correccional de Nueva Jersey comenzó a permitir que los presos fueran alojados en instalaciones para personas del sexo opuesto de acuerdo con su supuesta «identidad de género» en 2021, pero modificó la política a fines del año pasado debido a la cobertura poco halagüeña de controversias similares. Ahora los reclusos “transgénero” tienen una “presunción refutable” de las instalaciones que desean, pero los funcionarios de la prisión pueden anularla.
Eso significa que, en teoría, la presión pública podría hacer que Volz y Romero fueran trasladados a una prisión para hombres, algo que los activistas de #GetMenOut esperan poder lograr. El mes pasado, se manifestaron en las afueras de la capital del estado en Lansing para exigir su remoción, durante la cual leyeron cartas de reclusas reales en Edna Mahan expresando temor de ser agredidas sexualmente por prisioneros varones.
En los últimos años, ha habido una creciente preocupación en todo el mundo sobre la colocación de hombres que dicen ser mujeres en poblaciones penitenciarias femeninas, lo que ha demostrado ser un medio tanto para asegurar un trato más ligero durante el encarcelamiento como para obtener un fácil acceso a las mujeres para aprovecharse de ellas.
Por Calvin Freiburger.
Martes 9 de mayo de 2023.
Life Site News.
