Momentos cruciales de la Conferencia del Episcopado Mexicano, no sólo por el ambiente político, también los actuales desafíos sociales, como el del fenómeno migratorio, y de la evangelización. Además de la visita ad limina, la 114 asamblea ordinaria tiene la importante misión de preparar el próximo diálogo nacional por la paz a celebrarse en Puebla en septiembre, mientras, a nivel local, las comunidades y diócesis van formando los grupos de escucha y diálogo propiciadores de la pacificación del país.
Este domingo de la misericordia, parroquias y comunidades pidieron por el éxito de asamblea. Por su parte, el arzobispo Rogelio Cabrera López, presidente de la CEM, pidió a los fieles incluir en su “oración a todos los obispos de México ya que esta semana tendremos nuestra reunión ordinaria para seguir trabajando en la construcción de una pastoral que responda a las necesidades del país, como tema principal, será el tema de la construcción de paz”.
El secretario general de la CEM, Ramón Castro Castro, envió un mensaje en redes sociales, en el que solicitó la oración de los fieles “para discernir con claridad lo que Dios quiere de su Iglesia en México en este momento histórico tan difícil”, Solicitando así la “solidaridad espiritual” Castro explicó que la 114 asamblea debe tener por resultado el discernimiento y actuación de los obispos. Previamente, al término de la misa del domingo 16 de abril, justificó ante los fieles congregados en la catedral de Cuernavaca, su ausencia los próximos domingos 23 y 30 de abril debido a la responsabilidad de coordinar la visita ad limina de los obispos de México a Roma. Serán tres grupos, divididos por regiones, los que irán ante el Santo Padre para darle a conocer el estado de cada una de las diócesis del país.
El mensaje del secretario general de la CEM puede verse aquí.