Tras los meses de confinamiento, las diócesis españolas han planteado una reapertura de los cursos de catequesis que contempla hasta cuatro escenarios posibles, para garantizar que se cumplen los estándares de seguridad en la prevención del coronavirus a la vez que se supera el bloqueo de las actividades pastorales que se ha experimentado desde la llegada de la pandemia.
El Secretariado de la Comisión de Evangelización, Catequesis y Catacumenado de la Conferencia Episcopal Española ha publicado, para empezar, un vídeo con el que arranca un conjunto de materiales audiovisuales destinados a la formación catequética online de los menores. Pero es tarea de cada diócesis elaborar su propio protocolo, adaptando a la realidad de sus parroquias las medidas de prevención recomendadas por la Conferencia Episcopal, a la luz de las indicaciones del Ministerio de Sanidad.
Modelo presencial
Mantener una distancia de seguridad de al menos 1,5 metros entre cada niño es una medida que comparten todas las diócesis que ya han publicado su protocolo para un reinicio de la catequesis presencial. Siendo posible este caso, “las salas tendrán que ventilarse todo lo posible” y los grupos se limitarán a un máximo de “10 jóvenes”, como especifica en su página web la diócesis deÁvila.
“En cada espacio debe constar el número de aforo”, además de las señales que recuerdan guardar distancia, apuntan en la web desde Canarias. Por su parte, la diócesis de Sevilla advierte de “no acudir a catequesis a aquellas personas que presenten fiebre superior a 37,2º C o algún otro síntoma compatible con la COVID-19, así como aquellos que estén en periodo de cuarentena domiciliaria”. Estos grupos-burbuja o “grupos de convivencia”, como los ha denominado la diócesis de Aragón, interactuarían con mascarilla obligatoria en “zonas comunes” desinfectadas. Dentro de las que, como en los centros educativos, habrá un coordinador COVID para supervisar que “cada uno tiene su sitio y cuida su material”
Modelo semipresencial y modelo online
Si la asistencia presencial resulta inviable, las diócesis han diseñado una modalidad online para retomar la catequesis, lo mismo que avisan de que el formato de estos cursos podría ser mixto, siguiéndose por medio de la participación en algunas reuniones presenciales y desde casa. Este formato inevitablemente reduciría el papel de los y las catequistas en favor de la familia de cada niño, por lo que diócesis como la de Ávila han publicado guías didácticas para los padres. El Catecismo Mi encuentro con el Señor. Los primeros pasos en la fe (EDICE 2019) se complementaría con orientaciones telemáticas de la parroquia “para usar el Catecismo en familia”.
Estos grupos-burbuja o “grupos de convivencia”, como los ha denominado la diócesis de Aragón, interactuarían con mascarilla obligatoria en “zonas comunes” desinfectadas. Dentro de las que, como en los centros educativos, habrá un coordinador COVID
La coyuntura de la pandemia, desde la perspectiva de la Archidiócesis de Valencia, va a posibilitar “una catequesis con un protagonismo más acentuado de la familia como transmisora de la fe”. Por ello los obispos aplauden las ‘iglesias domésticas’ y recuerdan “la importancia de cuidar la celebración del domingo”.
A merced de las circunstancias sanitarias
La jerarquía eclesiástica que ya se ha pronunciado sobre la reapertura de la catequesis (Galicia fue la primera, como adelantó RD hace unos días) recuerda que “la implementación de este servicio educativo y evangelizador” va a depender en todo momento de la actualidad sanitaria y de las restricciones que impongan las autoridades del gobierno. A merced de esa incertidumbre, diócesis como la de Sevilla hablan incluso de un “Modelo Cuarto”, que pudiera activarse para cubrir mínimos en caso de que ni el presencial, ni el semipresencial ni el online pudiesen desarrollarse. Lo más aconsejable, dicen, es ponerse en contacto con los responsables de cada parroquia para mantenerse informados.