Frente a la cada vez más extendida política de promover y legalizar el llamado «cambio de sexo» infantil en el mundo, una diputada mexicana ha propuesto la imposibilidad legal de que los menores de edad puedan ser mutilados ni hormonizados.
La legisladora mexicana América Rangel, sostuvo un diálogo con Raúl Tortolero en una conversación difundida a través de redes sociales. En su intervención, la dputada hizo referencia a diversos intereses que parecen confluir en la presión para que los menores pudieran ser objeto de intervenciones –de «cambio de sexo»–, que los «marcarán» para el resto de su vida.
Comentó que confluyen los intereses de las grandes corporaciones farmacéuticas privadas, fabricantes de medicamentos que desean popularizar, así como los de aquellos que tanto por cuestiones ideológicas, como por actividades criminales, tienen a los menores de edad como un objetivo.
Así las cosas, los niños son objeto de enorme presión.
En diversos países del mundo se ha legalizado el «cambio de sexo» y también, en respuesta, legislaturas locales han dado marcha atrás en los ordenamientos que la permitían.