Con muchos años de estar en funcionamiento las campanas de la Catedral Metropolitana de Tulancingo, así como la de la Expiración y de Los Angelitos, se consideran de las más antiguas que hay, aunque no hay un dato preciso de cuándo fueron colocadas y cuándo pudieron haber sido cambiadas, tras las remodelaciones de estos espacios de fe.
Hace aproximadamente un año se registró el robo de una de las campanas en la iglesia de Nuestra Señora de La Luz, comentó el párroco de la Catedral y cronista de la Arquidiócesis de Tulancingo Juan Bautista: “No fue por lo antiguo porque es una de las iglesias más recientes, tal vez se la llevaron por su material a base de cobre”
Las campanas en los recintos eclesiásticos revisten vital importancia, refiere el cronista.
Se dijo que la Capilla de la Expiración, ha sido motivo de restauración, sin embargo, la esencia no se ha perdido. Es un lugar histórico que data desde 1526 y es las más antigua construida por los padres franciscanos en la región, según el Catálogo de Construcción Religiosas del Estado de hidalgo, se dice que había en el techo “un crisol viejo que funcionaba como campana”
Este punto es uno de los protegidos por el Instituto Nacional de Antropología e Historia, INAH, pero tuvo una reconstrucción; se conoce que el ábside de muros de mampostería que sostienen la cúpula con linternilla, corresponde a la primera etapa constructiva, y la campana del lugar pudiera tener más de un siglo al igual que la de la Catedral Metropolitana de Tulancingo, y sobre todo son de material de cobre, pero no hay datos precisos ni en el Catálogo antes citado.
En la Arquidiócesis de Tulancingo hay un total de 92 parroquias, cuatro vicarías fijas, seis cuasiparroquias, una rectoría y un Templo Expiatorio en lo que comprenden los estados de Hidalgo, Puebla y Veracruz, todas ellas con una campana y que replican para llamar a los fieles.
Con información de El Sol de Hidalgo/Concepción Ocádiz
