Mons. Livio Melina, ex presidente del Instituto Pontificio Juan Pablo de Roma, ha alzado la voz para denunciar, lo que, en su opinión, está siendo una “tentación actual” de muchos teólogos en cuanto a teología moral y sexual se refiere.
Ayer presentó en la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid el “Diccionario de sexo, amor y fecundidad” Editorial Didaskalos, escrito por el sacerdote José Noriega de los Discípulos de los Corazones de Jesús y María, y el matrimonio René & Isabelle Ecochard, médicos del Hospital Universitario de Lyon. En este diccionario han participado más de 200 autores.
El evento fue introducido por el sacerdote, Carlos Granados, director de la editorial y por el obispo emérito de Alcalá de Henares, Mons. Juan Antonio Reig Pla.
Fruto de cuatro decenios
Granados señaló que el diccionario es el fruto de cuatro decenios de maduración intelectual, pastoral y eclesial sobre los grandes temas del matrimonio y de la familia que ha tenido lugar en el Instituto Pontificio Juan Pablo II en estos años y que creó en el Papa Wojtyla en 1982.
«Es una obra monumental, de profundización, que ha estado en la vida real de la familia, en la que participan casi 200 autores, para hablar sobre la familia, el matrimonio y la sexualidad humana desde todas las dimensiones: pastoral, antropológica y pedagógica. Es un trabajo en comunión y en amistad. No es una investigación de laboratorio sino el fruto de una vida familiar, la visibilidad de lo que las mismas familias han podido vivir en amistad”, señaló Granados.
Después tomó la palabra Mons. Livio Melina que no escatimó palabras para advertir de algunos debates que se están produciendo en el seno de la Iglesia y que se alejan del mensaje del Evangelio y de la Doctrina de la Iglesia.
Sobre el Papa Francisco
«El pasado 13 de mayo, el Papa Francisco dirigiéndose a los participantes en una conferencia internacional de teología moral, denunció en tono vibrante, la actitud que, a su juicio, más daño hace a la Iglesia hoy: la de ir hacia atrás, causada bien por el miedo, por la falta de ingenio o por la falta de coraje. Y dijo textualmente: es cierto que los teólogos y los cristianos debemos volver a las raíces, pero avanzar, porque retroceder no es cristiano, cuidado con este retroceso que es una tentación actual, incluso para los teólogos de la teología moral”, dijo en su conferencia.
Melina, a quien han acusado de corregir a Francisco, hizo referencia a estas palabras del Papa, pero para incidir en que hay que «volver a las raíces» y no como las han interpretado en el libro “Ética teológica de la Vida”, de la Pontificia Academia de la Vida y editado por su presidente el arzobispo Mons. Vincenzo Paglia, que han utilizado también las mismas palabras del Papa en el prólogo del volumen.
Recordemos que sobre este libro, nueve científicos, entre ellos un miembro de la Pontificia Academia para la Vida, han corregido a la Academia a raíz de algunas cuestiones que se alejan del Magisterio de la Iglesia.
Cambio radical de paradigma
“Este volumen de la Pontificia Academia de la Vida, propone un modelo teológico innovador, que consistiría en un cambio radical de paradigma en virtud del cual la ética teológica asume la tarea hermenéutica de una reinterpretación del valor vinculante de las normas morales enseñadas en documentaos magisteriales como la encíclica Humanae Vitae, la Evangelium Vitae y la instrucción Donum Vitae de la Congregación de la Doctrina de la fe con la aprobación del papa Francisco”, afirmó.
Mons. Melina señaló que el texto base presentado en el volumen de la Pontificia Academia para la Vida y muchos de los comentarios teológicos de este libro proponen «como expresión del esperado progreso teológico, ir más allá de la observancia literal de la norma, propuesta por el Magisterio que han definido la anticoncepción y la procreación artificial que prescinde del acto conyugal, como actos intrínsicamente malos, en contradicción explícita con la encíclica Veritatis Esplendor».
Así, Livio Melina dijo que los autores de este trabajo afirman «que no es posible especificar moralmente un acto solo por su objeto sino que también hay que tener en cuenta la singularidad de las circunstancias y la intencionalidad subjetiva de la persona, y aplican este principio no solo a los actos buenos por su objeto sino también a los actos intrínsicamente malos”.
Rigoristas y peligrosos
Por lo tanto, las normas morales negativas ya no representan absolutos, sino solo un primer punto de referencia para el juicio subjetivo de la conciencia.
“Tal paradigma proclama el papel decisivo de la conciencia sobre la norma y los que rechazasen este nuevo paradigma para la moral y en particular la moral de la vida y sexual, tendrán que ser calificarlos de rigoristas y tacharlos como peligrosos enemigos de la misión de la iglesia hoy”, dijo.
El diccionario que ha presentado Melina es una imponente obra de 1.100 páginas de cuatro décadas de trabajo que pretende situarse en la estela de la Humanae Vitae, una encíclica profética a la revolución sexual. «La encíclica de san Pablo VI es el choque contra esa modernidad», aseveró el ex presidente del IPJPII.
¿Retroceso de los conservadores?
Por lo tanto, para Melina, la pregunta que surge con este Diccionario es: «¿Se trata de un retroceso por parte de los conservadores rígidos que se oponen al progreso de la sociedad como de la Iglesia, al erigir a la Humanae Vitae como clave del misterio de la sexualidad humana? ¿Se oponen los autores del Diccionario al progreso científico, a la evolución cultural del último siglo y al desarrollo teológico y pastoral de esta década?».
Para el sacerdote, para salir de este desasosiego hay que comprender el sentido auténtico y cristiano y del progreso que también quiere el papa Francisco en su exhortación a los teólogos de la moral.
«El diccionario da testimonio del gran progreso que se ha producido en la vida de las personas que han sido fieles a la exigente, pero verdadera enseñanza de la Humanae Vitae. En estos 50 años, ha tenido lugar una gran aventura intelectual y humana”, concluyó.
Mons. Reig Pla
Por su parte, Mons. Reig Pla calificó este Diccionario como un «manantial de vida porque en este libro he visto toda mi vida desde que comencé a ser sacerdote». Y además, reconoció la gran labor que ha realizado a lo largo de estos años el Instituto Pontificio Juan Pablo II que creó el Papa Wojtyla para reunir a tantos teólogos de tantos continentes para decir la verdad lo que significa la vocación al amor.
Además, dijo que este Diccionario enseña la luz y el camino de la vida, «que disipa las tinieblas de este momento cultural, que distorsiona la sexualidad y que ha producido un retroceso de lo humano que adormece las conciencias en la vocación al amor».
Reig Pla espera también que con este Diccionario «muchos falsos profetas sean desenmascarados».
En este vídeo se puede ver la presentación del Diccionario.
MADRID, ESPAÑA.
JUEVES 20 DE OCTUBRE DE 2022.
RELIGIONCONFIDENCIAL/ELCONFIDENCIALDIGITAL.