Los ataques del feminismo a la Iglesia y fieles católicos se recrudecen en Hispanoamérica: en las últimas horas, diversos medios y testigos han denunciado las graves agresiones que se produjeron el pasado 28 de septiembre durante las diversas concentraciones realizadas con motivo del «Día de Acción Global por un aborto legal y seguro» en México.
Los incidentes más significativos tuvieron lugar en Guadalajara (Jalisco, México), cuando centenares de manifestantes feministas se congregaron ante el templo Expiatorio de Guadalajara, cercano a la catedral y uno de las plazas cristianas más importantes de la ciudad. Allí permanecían fieles católicos rezando y tratando de impedir la vandalización del recinto cristiano.
Mientras algunas manifestantes emitían consignas contra los feligreses, otras realizaban pintadas en el exterior del templo.
Desde el comienzo de la manifestación se reportaron agresiones contra la policía y cuerpos de seguridad.
En el momento álgido de la protesta, testigos y fieles comentaron en redes sociales que un hombre se dirigió a una de las feministas para evitar que lanzase una botella, según algunos de ellos, cargada de ácido.
Fue en ese momento cuando una multitud de manifestantes se abalanzaron sobre el feligrés, propinándole golpes en la cabeza con un bate, teniendo que ser ingresado en el hospital. Actualmente se encuentra estable.
Una periodista presente en la catedral comentó al canal Y que viva Cristo Rey relató que nada más comenzar la manifestación en torno a las 14:30 horas comenzaron a llegar «mujeres que mandaban insultos contra los que rezábamos tranquilamente».
Las mujeres comenzaron a acercarse al templo, aún sin agredir a los presentes. Todo comenzó con «gritos y groserías» mientras los fieles veían a las manifestantes con «martillos, mazos y botellas cargadas» con lo que se cree que eran sustancias nocivas como «cloros o ácidos».
En torno a las 15:00 horas eran centenares de manifestantes las presentes ante el templo. Los feligreses comenzaron a rezar el Rosario mientras se acercaban las asaltantes atravesando el cordón de seguridad.
En ese momento, una de las encapuchadas «golpeó a un señor y lo tiraron al suelo sangrando cuando la policía logró que no se acercaran más al señor. Se lo tuvo que llevar la ambulancia» mientras «sangraba mucho por la cabeza» tendido en el suelo. Junto con este herido de unos 50 años, otro de más de 30 fue igualmente golpeado.
Las agresiones fueron igualmente captadas por testigos presenciales en las inmediaciones del templo, que se pueden ver aquí.
Otra persona fue igualmente agredida en Guadalajara con bates por una multitud de más de 10 feministas, como se puede ver en estas imágenes:
Durante las últimas horas, Colombia ha sido otro de los escenarios de la violencia feminista contra la Iglesia. Concretamente contra la Catedral Primada de Colombia, cuya puerta fue incendiada y su fachada vandalizada con grafitis por manifestantes abortistas el mismo 28 de septiembre.
Puedes ver aquí a las manifestantes incendiando el portón:
El arzobispo de Bogotá y presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, monseñor Luis José Rueda Aparicio condenó los hechos a través de un comunicado: «Exigimos respeto civil por parte de los promotores y participantes en las marchas y protestas, solicitamos a las autoridades que garanticen la vida, honra y bienes de la ciudadanía».
Ambos ataques tuvieron lugar el 28 de septiembre, el mismo día que el dirigente sandinista de Nicaragua, Daniel Ortega, acusase a la Iglesia de «asesina» y de cometer «miles de crímenes» o «golpes de Estado».
POR J.M.C.
SÁBADO 1 DE OCTUBRE DE 2022.
ReL.
